La lactancia materna es la mejor elección si hablamos de supervivencia, del crecimiento y del desarrollo infantil adecuado, de la igualdad de posibilidades y de protección del medio ambiente.
La Estrategia Mundial para la Alimentación del Lactante y del Niño Pequeño elaborada por la Organización Mundial de la Salud y UNICEF, establece que "las prácticas adecuadas de alimentación basada en la evidencia resultan esenciales para lograr y mantener una nutrición y una salud adecuada. Las prácticas de alimentación inadecuadas y sus consecuencias representan el principal obstáculo para el desarrollo socioeconómico sostenible y la reducción de la pobreza”.
“La estrategia mundial se basa en pruebas científicas de la importancia de la nutrición en los primeros meses y años de vida y del papel fundamental que juegan las prácticas de alimentación correctas para lograr un estado de salud óptimo. No practicar la lactancia natural, y especialmente la lactancia natural exclusiva durante el primer medio año de vida, representa un factor de riesgo a efectos de morbilidad y mortalidad del lactante y del niño pequeño, que se agrava aún más por la alimentación complementaria inadecuada. Las repercusiones duran toda la vida y son, entre otras, los malos resultados escolares, una productividad reducida y las dificultades de desarrollo intelectual y social.”
En el punto tres de la definición del reto de La Estrategia Mundial para la Alimentación del Lactante y del Niño Pequeño, se especifica lo siguiente: “La estrategia mundial para la alimentación del lactante y del niño pequeño se basa en el respeto, la protección, la facilitación y el cumplimiento de los principios aceptados de derechos humanos. La nutrición es un componente fundamental y universalmente reconocido del derecho de los niños del disfrute del más alto nivel posible de salud, tal como se declara en la Convención sobre los Derechos del Niño. Los niños tienen derecho a recibir una nutrición adecuada y a acceder a los alimentos inocuos y nutritivos, y ambos son esenciales para satisfacer el derecho al más alto nivel posible de salud. Las mujeres, por su parte, tienen derecho a una nutrición adecuada, a decidir el modo de alimentar a sus hijos, a disponer de información completa y a unas condiciones apropiadas que le permitan poner en práctica sus decisiones. En muchos entornos, estos derechos aún no se han hecho efectivos”.
Lo que se quiere lograr con la aplicación de esta estrategia es cambiar la triste realidad que estamos padeciendo como Humanidad. “La malnutrición ha sido la causa, directa o indirectamente, del 60% de los 10,9 millones de defunciones registradas cada año entre los menores de cinco años. Más de dos tercios de esas muertes, a menudo relacionadas con unas prácticas inadecuadas de alimentación, ocurren durante el primer año de vida. Tan sólo el 35% de los lactantes en todo el mundo son alimentados sólo a pecho durante los primeros cuatro meses de vida; la alimentación complementaria suele comenzar demasiado pronto o demasiado tarde, y con frecuencia los alimentos son nutricionalmente inadecuados e insaludables.”
El propósito es mejorar, a través de una alimentación óptima, el estado de nutrición, el crecimiento y el desarrollo, la salud y, de este modo, la supervivencia de los lactantes y niños pequeños.
Los objetivos son muchos pero se pueden nombrar algunos: sensibilizar e identificar enfoques para la solución, aumentar el compromiso de los gobiernos y de las organizaciones, crear un entorno apropiado para ayudar y apoyar a las madres para que amamanten, entre otros.
La sociedad en su conjunto debería preocuparse y ocuparse del tema, la lactancia materna nos compete a todos. Mamás más comprometidas con sus recién nacidos, niños más sanos, vecinos más solidarios, gobiernos más ocupados, profesionales de la salud y agentes de salud comprometidos con la lactancia materna nos regalarán y se regalarán un futuro mejor, más humano y mucho menos agresivo.

Viviana de los Ríos
Preparadora de Partos
Taller Gestación
vdga@arnet.com.ar

Fuentes:
Referendo por la junta ejecutiva del UNICEF
Segunda reunión ordinaria de la junta ejecutiva del UNICEF 17 de septiembre 2002
2002/12. Estrategia Mundial para la alimentación del lactante y el niño pequeño. La junta ejecutiva, aprueba la estrategia mundial para la alimentación del lactante y el niño pequeño, presentada en el informe “Nutrición del lactante y niño pequeño” (A55/15, de 16 de abril de 2002) y aprobada por la 55 Asamblea Mundial de la Salud en su decisión WHA55.25, 18 de mayo 2002.