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El grupo de empleados que llevó adelante la protesta frente a la firma textil, no pudo ingresar al lugar para completar su turno laboral. La situación fue denunciada ante la Secretaría de Trabajo |
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Trabajadoras textiles de la empresa Juan Jacobo e hijos, llevaron adelante ayer una medida de fuerza en protesta por la falta de pago del ítem producción (cantidad de productos que realiza un obrero por día) por parte de la patronal.
"Desde hace bastante tiempo que estamos pidiendo un ítem de convenio como lo es el de producción. La empresa se niega a pagarla, a pesar de que es parte del sueldo", explicó María del Carmen Ponce, secretaria General del Sindicato Obrero de la Industria del Vestido y Afines (SOIVA).
"La empresa presenta de manera unilateral una planilla de producción que humanamente es inalcanzable por el personal. Al no lograr los obreros lo que ellos exigen e imponen imperativamente, no abonan la producción", acotó.
Vale recordar que el adicional reclamado representaría entre el 20 y el 30% de los haberes que se abonan a los empleados.
A través de la retención de servicios por tres horas y presencia con pancartas, bombos y pirotecnia en la puerta de la conocida textil local, las más de veinte personas que integran el plantel laboral hicieron visibles sus demandas.
Cumplido el lapso de tiempo previsto para la ejecución del paro, los trabajadores quisieron ingresar a la planta fabril para completar su turno de trabajo, pero no se les permitió el acceso al lugar.
Ante esta situación, el grupo demandante dirigió sus pasos hacia la sede local de la Secretaría de Trabajo provincial. Allí se labró un acta, dejando constancia de lo sucedido.
La palabra de los trabajadores
Según pudo conocer EL DIARIO, los empresarios exigen para abonar este adicional al salario básico, que cada obrero produzca 16 prendas por jornada laboral.
Lo propuesto por la patronal es rechazado de plano por los trabajadores que consideran "imposible" e "inhumano" la meta trazada.
La modalidad de trabajo en línea y las maquinarias antiguas, se suman también como factores que condicionan negativamente las intenciones de los dueños de la fábrica.
Para dirimir el conflicto, los textiles acompañados por el SOIVA, llevaron el reclamo al Ministerio de Trabajo y tras cuatro infructuosas audiencias el acuerdo no se concretó.
Como corolario, la empresa no abonó en el salario mensual el ítem, haciendo detonar una puja que promete acrecentarse en los próximos días.
"Hemos venido reclamando de manera pacífica pero ellos no cambian de postura. Queremos parámetros normales de producción pero es evidente que evaden al pago del ítem porque no les conviene", expresó Ponce.
“Queremos que se sienten a conversar con las trabajadoras con propuestas coherentes y no como hasta ahora, de manera intransigente”, anexó.
“Si las cosas no cambian, en asamblea decidiremos los próximos pasos a seguir”, concluyó la dirigente sindical reporteada.
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