Productos realizados con las hábiles manos de emprendedores y artesanos. Maravillas en madera, cerámica, vidrio. Sorpresas con aerosoles tirando colores al viento y embelleciendo una lámina.
Tantas cosas para ver. Tantos stands para visitar y admirarse.
El recorrido socio-productivo, instalado en plaza Centenario, se convirtió en uno de los polos de atracción para las familias de la región, en la tibia tarde de domingo.
De pronto, ese espacio verde, esa postal ciudadana ubicada en pleno corazón de la Villa sintió el calor de cientos de personas que la incluyeron en el paseo dominical.
El espíritu navideño se instaló entre los árboles y las fuentes. Numerosos vecinos tuvieron al alcance de sus manos la posibilidad de comprar los tradicionales regalos para colocar en los pinos en nombre del “padre” del Polo Norte.
Desde un par de aros hasta sofisticados objetos tallados, pueden encontrarse en los stand armados en la plaza céntrica.
Treinta y cuatro emprendedores, representantes de la economía social, se encuentran mostrando sus creaciones.
“Buena calidad y precios accesibles”, es la consigna de quienes han encontrado una salida laboral en el marco de los programas para microemprendimientos impulsados desde la dependencia municipal que conduce Virginia Martí.
“Estamos ofreciendo nuestros productos relacionados con la Navidad y se está moviendo”, dijo uno de los puesteros a nuestro matutino.
Hasta el 24 de diciembre, la exposición seguirá en plaza Centenario.
Los stands comienzan su actividad a las 9 y la mayoría sigue hasta la noche.
“Todas estas ferias fortalecen a la economía social”, señalan los responsables del recorrido socio-productivo.
En tanto, desde el Gobierno local ya están organizando un espacio para que los emprendedores locales se instalen a la vera del Ctalamochita en febrero, de igual manera que lo hicieron el año pasado.
“La próxima exposición será para el Festival de Peñas”, indicó, finalmente, una fuente municipal.