Trabajadores que se desempeñan en la empresa textil Juan Jacobo e hijos, realizaron ayer una protesta de cuatro horas frente al ingreso de la planta fabril.
La medida de fuerza que también se desarrolló días atrás con infructuoso resultado, tiene como principal argumento el pedido de reconocimiento e incorporación al salario básico del adicional por producción (piden que sea de un 20% respecto de las remuneraciones mensuales).
Como se recordará, los operarios no perciben lo que corresponde a este aspecto debido a las diferencias que sostienen con la patronal.
Según se pudo conocer desde la firma exigen hasta 16 prendas por persona, mientras que los obreros textiles sostienen que el número de producciones por persona debería ser mucho menor al exigido.
Con discusión y ruptura de diálogo mediante, los empleados de la firma Jacobo no cobran el adicional y elevan el tono de sus reclamos ante los empresarios.
"No hemos llegado ni a dialogar. La empresa nos cierra las puertas y no escucha las demandas de la gente que trabaja, creo que si la situación sigue por estos carriles va a ir empeorando", advirtió la secretaria General del Sindicato Obrero de la Industria del Vestido y Afines (SOIVA), María del Carmen Ponce.
Vale destacar que luego de la finalización del último paro, los empleados que participaron de la movida, no pudieron acceder a sus puestos laborales por determinación de la empresa.
"Hemos dejado constancia en la Secretaría de Trabajo de lo sucedido, es decir, el paro de los trabajadores y la negativa empresarial", indicó Ponce.
Según la gremialista, la textil villamariense es la única de la provincia y de esta región del país que no reconoce los ítems contemplados en el convenio colectivo de trabajo del sector.

Amenazados

Este matutino pudo conocer que los operarios reciben amenazas para no plegarse a las huelgas.
Según las voces consultadas por EL DIARIO, los "aprietes" e intimidaciones son moneda corriente hacia adentro del establecimiento fabril.
“A varios les han dicho que si siguen haciendo paro los van a dejar cesantes”, indicaron los reporteados.
“Ante el miedo de quedarse sin trabajo, cuatro o cinco chicas, no se han sumado al grupo que pide que nos paguen los que corresponde”, agregaron.
Otra de las advertencias vertida sobre el grupo que lidera las protestas, tiene que ver con la posibilidad de suspender por distintos lapsos de tiempo a los huelguistas y el cierre de la empresa en la ciudad si continúan las medidas de fuerza.
“Todos tenemos miedo pero también estamos cansados de muchas cosas. Estamos hartos de ser los esclavos”, sentenciaron.
“Los empresarios tienen que entender que lo único que buscamos es llegar a un acuerdo que respete las leyes laborales y, sobre todo, los derechos humanos de cada empleado”, concluyeron.