El bellvillense Mario Caranta, padre del arquero Mauricio de Boca (foto), aseguró ayer que su hijo "nunca quiso dejar de jugar" y dijo que el entrenador Carlos Ischia decidió prescindir de sus servicios.
"Si alguien toma una determinación y después no lo quiere admitir, es otra cosa", sentenció el padre de Mauricio Caranta, en referencia a la decisión de Ischia de sacar a su hijo de la primera de Boca, en declaraciones a radio Del Plata.
"Es un problema en el trabajo. Fue una decisión técnica de un jefe de grupo. Mauricio no tiene problemas familiares y nunca quiso dejar de jugar", agregó.
"Pedro Pompilio dijo que quiere escuchar la campana de mi hijo y por eso él viajó a Buenos Aires para charlar. Está triste, no quiso escuchar el partido, pero los dirigentes de Boca son personas inteligentes y creo que habrá una solución", completó.
El padre del arquero cordobés no dudó en afirmar que su hijo no integró la formación de Boca ante Estudiantes de La Plata por una decisión de Ischia y lamentó que el técnico no haya admitido públicamente que era una determinación suya.
"El tema se agigantó porque Mauricio trabaja en un lugar notorio como Boca. Ayer (por el domingo) pasó el día en familia (en Córdoba) por el cumpleaños de su hermano. No hay problemas familiares. Venimos de la cuna siendo de Boca", enfatizó.
"Lo que veo es que el equipo ya no puede generar el juego de antes, cuando mostraba una seguridad impresionante. Hay muchos motivos por los cuales el equipo juega mal, el responsable no es una sola persona", concluyó Mario Caranta.
s ¿Y ahora?
Mauiricio Caranta y su representante, Luis Grillo, se reunirán hoy con el presidente de Boca, Pedro Pompilio, para definir el futuro del arquero.
La dirigencia de Boca, agobiada por la caída futbolística del equipo, que tras la derrota ante Estudiantes de la Plata quedó con mínimas chances de luchar por el torneo local, ingresará en una semana clave ya que deberá resolver si continúa o no en el club el bellvillense, marginado del plantel profesional.
La polémica decisión que adoptó el entrenador Carlos Ischia, el viernes pasado, produjo un impacto en el grupo, cuyas secuelas siguen salpicando a los principales involucrados.
Tras la resolución de Ischia, el arquero viajó hacia Córdoba y regresó ayer a la Capital Federal, aunque el domingo por la noche habló Pompilio, y en el transcurso de las próximas horas volverán a reunirse para encontrarle una salida a la crisis.
Pompilio había expresado que "parece que Caranta no quiere jugar en Boca" dado que, según el dirigente, pidió ser excluido del equipo, de acuerdo a lo que le comentó Carlos Ischia, quien elevó un informe de la situación al mandatario xeneize.
Diversas hipótesis se manejan a nivel dirigencial, ya que si bien en un principio se había evaluado la necesidad de rescindirle el contrato al futbolista debido a su negativa de continuar jugando -firmó convenio hasta el año próximo- otras alternativas que se manejan es que Pompilio tenga "frente a frente" una conversación con Caranta y allí quede definido el tema.
Voces cercanas a la máxima autoridad de Boca deslizaron que "la sangre no llegará al río" ya que el futbolista volverá hoy a entrenarse con sus compañeros y el titular seguirá siendo Javier García, el juvenil arquero que jugaría el superclásico en el Monumental.
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