Aquarama volvió con 2011. Dos noches con una gran convocatoria de público dieron marco al regreso de los espectáculos en y a la vera del río Ctalamochita.
La segunda velada, la del domingo, fue la más convocante y tuvo entre sus principales atracciones al humorista e imitador Martín Bustos (ganador del programa televisivo Talento Argentino con su personaje "el Pastor Quemao"), junto a importantes artistas locales, en una jornada que se extendió por ocho horas.
La consagración de la Reina de Aquarama recayó en la representante del Centro Vecinal El Rosedal: Valentina Salazar y Maité Pérez y Alexandra Rovera resultaron primera y segunda princesas.
Ramón Heredia y Pablo Videla estuvieron a cargo de una brillante conducción.
Así fue el cierre del regreso de Aquarama, festival que volvió después de tres décadas, con una asistencia calculada por los organizadores en diez mil personas. El grupo musical Chébere subió al escenario cerca de las 3.30 de la madrugada del lunes.
Pero la reedición comenzó la noche del sábado, con la primera cita en el balneario Paso de la Arena ubicado en el Parque Francisco Tau, aunque también varias personas eligieron la otra margen para observar los espectáculos.
La apertura la realizó el ballet "Pampa y Senda", continuó con "Claridad Natural", para luego dar paso a la cantante melódica Patricia Molina. La grilla dio paso a Los Amigos del Acordeón, seguido de la impecable actuación del bailarín de tango bellvillense radicado en Buenos Aires, Pablo Ugolini y su compañera.
Llegó el turno del desfile náutico y la presentación de las 15 aspirantes a Reina de Aquarama, con una gran sorpresa: como si se tratase de un gondolero veneciano, el cantante lírico Juan Francisco Sierra apareció sobre una pequeña embarcación interpretando "O sole mío" ante la mirada atónita del público, que no daba crédito a lo sucedido. Aquarama recibió en su escenario también al saxonofonista Julio Botti y el guitarrista Carlos Paván. Siguió el turno de Patricia “Coki” Ramírez, que convocó a "Machaca La Chaca" para interpretar juntos una chacarera, dejando luego en el escenario al grupo del “Topo” Domínguez, para que el espectáculo continuara a puro folclore. La presentación de “Pichirica” Cámara y Los Piripipí, fue el final de la noche sabatina, pero sólo fue el comienzo de un Aquarama que resurgió luego de 31 años.