Para el afuera, el Gobierno dirá que fue un año de concreciones: inicio de la obra del puente, cuadras asfaltadas, confirmación de que se harán 200 viviendas, firma de convenio para la remodelación de la avenida Libertad, etcétera. Pero no se puede tapar el sol con las manos y la realidad es que el intendente Guillermo Cavagnero tuvo que apagar, o intentar apagar, varios incendios a lo largo del año que concluyó cinco días atrás.
El 2010 significó el tercer año de gestión del justicialista que remplazó a Marcelo Frossasco en el Sillón de Freytes aquel caluroso y controvertido diciembre de 2007, en que el hoy legislador dejó el poder envuelto en varias polémicas. Curiosamente, una vez más en el período pasado volvieron a enfrentarse.
Estos son los principales puntos que se destacan en este repaso del año en que falleció el hombre más poderoso de la Argentina, Néstor Kirchner:
• Pavimento. Se asfaltaron dos kilómetros y medio, según datos oficiales solicitados por EL DIARIO. Contempló pavimento y cordón cuneta.
La meta es que, en diciembre próximo, cuando el jefe comunal finalice su mandato, la gestión haya completado 14 kilómetros. Hasta hoy, se estaría en los 10 u 11.
Hacía años y años que Villa Nueva se encontraba en una virtual parálisis en cuanto a la obra de asfalto, pareciendo utópico para los vecinos ver tantas cuadras ya sin tierra. El anterior Gobierno, del también justicialista Frossasco, pavimentó menos de una decena.
El dinero que posibilitó semejante obra provino del Gobierno de la Nación y los trabajos estuvieron manchados por la sospecha que envuelve al Ente Intercomunal para el Desarrollo Regional (Eninder, que comanda el intendente de Villa María, Eduardo Accastello) de que se pagan sobreprecios por cada cuadra.
Cavagnero siempre negó cualquier irregularidad, hizo oídos sordos a las críticas y continuó alimentando su gran caballito de batalla, el de esta obra.
Un dato: el rápido deterioro en algunos tramos.
• Más cloacas. El Gobierno local, tomado de la mano del que encabeza Cristina Fernández de Kirchner, realizó esta obra en los barrios Los Olmos, Las Quintas, Vallecito, Medalla Milagrosa, Florida y Pinar de las Tejas durante 2010, sectores que equivalen al 12% de la ciudad.
Así, según datos oficiales, se alcanzó al 99% de la localidad con este servicio.
• Ayuda social. También por el aceitado vínculo entre la Intendencia y la administración nacional (con Eduardo Accastello como puente indispensable), Cavagnero entregó a lo largo del período 112 pensiones que gestionó su equipo.
La ayuda llegó para madres de siete hijos y para personas con invalidez.
Y se puso en funciones una extensión del mostrador de ANSES para atender los días viernes.
• La necesidad de un techo propio. El mandatario anunció con bombos y platillos la construcción de un plan de 200 viviendas en tierras del barrio El Vallecito, financiado por el Gobierno de la Nación.
A finales de año, aún se desconocía cuándo se llamaría a licitación para levantar este programa y se informaba que este mes se producirá el sorteo para ocupar las primeras 50 casas, ya que se adjudicarán las residencias en cuatro módulos.
El llamado de la Comuna para presentar los papeles a fin de resultar como posibles adjudicatarios de una vivienda expuso el drama de una ciudad: larguísimas filas de vecinos que hoy en día no tienen casa propia y deben pagar alquiler.
La demanda quintuplicó la cantidad que se ofertó.
Cavagnero dice estar seguro que en este año cumplirá el sueño de edificar 200 residencias, redujendo así el déficit habitacional que presenta la localidad hermana de Villa María.

De ser así, superará con creces a su antecesor en el cargo, quien en 8 años de administración no pudo finalizar las 36 casas de barrio La Floresta, las que concluyó el actual Gobierno. Casas que, dicho sea de paso, no pasaron por ningún proceso de adjudicación, circunstancia grave si se tiene en cuenta la tremenda carencia de esta población.
• Agendas cargadas. Es para destacar el diseño de actividades que dispuso el municipio, en conjunto con escuelas e instituciones, para los meses de mayo y octubre, por las fiestas mayas y el mes aniversario, respectivamente. También, sobresale el éxito de certámenes de poesía lanzados por la Dirección de Cultura local.
• La promesa. Cavagnero logró terminar el año al menos con la adjudicación a una firma (Arrow SRL) de una obra que era demandada y generaba polémica: la de la remodelación de la avenida Libertad, en pos de mayor seguridad vial. Debería haber comenzado; se presume que en febrero se inciarían los trabajos.
• Más seguridad, más escándalo. El Ejecutivo, con el apasionado y controvertido Fabián Pastorak en Seguridad Ciudadana, controló boliches y tránsito como nunca antes, en una ciudad en la que, en la calle, se decía que era “tierra de nadie”. Pero no todo lo que brilla es oro: por ejemplo, las actas de constatación de infracción de tránsito fueron bochadas, en un porcentaje importante, por la jueza de Faltas, Lilián Sosa, por no cumplir los requisitos que corresponden. Hubo duros cruces entre ambos funcionarios por supuestas falencias en ambas áreas, y la magistrada hasta llegó a deslizar corrupción.
• ¿La oposición en las filas del oficialismo? Una jugada de la oposición dejó a Cavagnero contra las cuerdas en el ámbito legislativo. Mauro Bizzarri, apoyado por el radicalismo y la por entonces representante del juecismo, se subió al sillón conductor, “bajando” a quien había presidido el órgano en 2008-2009, Francisco Bordini.
Hombre de Frossasco, Bizzarri planteó en diversas circunstancias diferencias con la actual gestión y hubo votos en sesiones trascendentes en consonancia con los ediles opositores y no con los oficialistas.
• La historia de nunca acabar. Salvo en dos meses, en los demás los trabajadores municipales tuvieron que soportar el pago de sus sueldos siempre fuera de término y la ciudadanía tolerar basura acumulada, calles sin riego y ausencia de actividad administrativa. Fue por los paros de los empleados, porque el municipio casi nunca pudo lograr tener a tiempo el dinero para abonar los haberes de una planta de personal que es excesiva, según dicen.
Esta situación involucró cruces entre autoridades locales y provinciales en más de una ocasión.
• No funcionaron. En su intento por achicar la planta de trabajadores, el intendente anunció un régimen de jubilación anticipada para quien así lo considere, pero no tuvo eco. También se lanzó un bono que remplazaba el medio aguinaldo (el de diciembre), que sirve para comprar en algunos comercios locales, los que luego pueden abonar impuestos municipales a través de esa cuasi moneda. Fue muy lenta la puesta en marcha y terminó efectivizándose con pena: apenas el 20% de los empleados lo tomaron.
• Yazmín, un bochorno. 8 años de edad, enferma. En marzo le usurparon la casa que le correspondía en el barrio Las Quintas, por un plan de Cáritas. Se la quitó una familia numerosa que no tiene hogar propio y que también la necesita. Cáritas y municipio se tiraron con munición gruesa. Cuando terminó 2010, todo estaba como entonces: en la vivienda, residiendo quienes la ocuparon ilegalmente. Yazmín, pagando alquiler. La denuncia judicial, durmiendo en un cajón de la Fiscalía a cargo de Daniel Del Vö.
Diego Bengoa

En la edición de mañana,
segunda y última parte

Epígrafes: 1) Fuego en el puente Alberdi. Mes a mes, los trabajadores debieron parar para poder cobrar
2) Mauro Bizzarri, cercano a la oposición, quedó en el primer sillón del Concejo Deliberante
3) Tránsito y dudas: la jueza reveló que un alto porcentaje de las actas de infracción se labran mal
4) Promesa: Cavagnero anuncia el Plan de 200 viviendas. Fue el lunes 31 de mayo de 2010