“Les pido a los empresarios que realicen un aporte, para que sean conscientes del esfuerzo que hace la comunidad, que hacen los argentinos, el Estado, al realizar esta obra”, señaló ayer el intendente Eduardo Accastello en el acto en que se traspasó la planta depuradora de líquidos cloacales, a la Cooperativa 15 de Mayo.
El mandatario hizo alusión así a los ajustes necesarios para evitar que las compañías contaminen y que esto “saque a la planta de uso”.
Accastello precisó que son entre 12 y 15 las firmas que tienen que readaptarse ante la puesta en funcionamiento de la planta depuradora y, ante una pregunta, indicó que algunas ya hicieron reformas, advirtiendo que “esto no es nuevo ya que desde 2006 venimos hablando del tema”.
“Hablaremos con los bancos para que les den créditos que les posibiliten ajustarse. No carguen con los trabajadores”, advirtió luego.
El jefe del Ejecutivo local reveló que en reuniones con empresarios algunos deslizaron que deberán tocar a los empleados: “Los trabajadores siempre terminan siendo la variable de ajuste”, advirtió.
“Tienen que saber que no permitiremos que toquen a los empleados”, dijo, y más tarde aclaró que “los empresarios no son nuestros adversarios, son nuestros empresarios y los vamos a ayudar”.
“Tirando químicos, por dar sólo un ejemplo, sacaría a la planta de régimen”, alertó.
El mandatario especificó que ninguna obra de refuncionalización de las empresas les demanda más de 400 mil ó 500 mil pesos y apuntó que tienen 120 días hábiles para efectuar las adecuaciones necesarias.
Muchas gracias. En su alocución, se encargó principalmente de agradecer: a los vecinos de la ciudad, al fallecido ex presidente Néstor Kirchner, a la actual presidenta Cristina Fernández, a su esposa y ex intendenta, Nora Bedano (por iniciar el proceso de la obra), a la empresa que efectuó los trabajos, a la Nación, a la provincia, al ministro Hugo Testa, a “Edgardo Bortolozzi, al ingeniero Hoc, a Hernán”, entre muchos otros.