El año pasado, Fabricio Rodríguez tocó parte del cielo artístico con las manos.
Hizo giras con Javier Calamaro y Abel Pintos, pudo actuar junto a uno de sus ídolos (David Lebón) por primera vez y lanzó su último álbum de estudio "El mundo de los silencios". Además, realizó una experiencia inolvidable en la cárcel local.
El destacado solista recuerda con EL DIARIO su año 2010 y comenta cómo fue el panorama a nivel nacional
¿Qué es lo que más te ha sorprendido de este año en cuanto a eventos y recitales?
- "Sin dudas no puedo dejar de mencionar la visita de Paul Mc Cartney a nuestro país. Creo que fue lo más importante. Y lo que más me sorprendió es la diversidad de eventos; festivales de todo tipo y para todos los gustos. Nos visitaron muchas bandas de gran prestigio internacional y y tener esa oferta en nuestro país es más que valioso porque quiere decir que el mercado y el público para esos artistas es muy tenido en cuenta."
¿De qué manera creés que capitalizás el haberte presentado junto a Javier Calamaro y Abel Pintos? ¿Dichas sociedades creativas van a continuar?
- "Del mismo modo que compartí escenario con Javier Calamaro o Abel Pintos lo hice con otros tantos artistas a los cuales admiro. Sin dudas este año con los artistas que mencioné he recorrido caminos muy importantes. Con Abel toqué en el Opera y participé como invitado en su disco en el tema ‘No me olvides’ que fue el corte de difusión. Con Javier me pasó lo mismo. Grabé en ‘Este minuto’ junto a Javier y Andrés Calamaro y la canción está votada como una de las cinco mejores del año. Toda esa experiencia me sirve muchísimo para darme a conocer. Gran parte del público que hoy me sigue es público de Abel, de Javier y les estoy eternamente agradecido a ambos porque han sido muy generosos conmigo y me han dado un lugar muy especial. Con ambos me vincula una gran amistad que va más haya de lo musical y eso es lo más importante que puedo capitalizar. Gracias a Javier Calamaro cumplí un sueño que fue compartir escenario con David Lebón. Luego de estar con David en el ‘detrás de escena’ me dejo muchísimo; esas cosas las atesoro. Con Javier vamos a pasar el verano en su casa componiendo. Yo colaboraré en su disco nuevo aportando canciones y mi armónica por supuesto. Pero este 2011 será netamente dedicado a mi banda Mr. Mojo."
¿Cómo evaluás tu experiencia de actuar en la cárcel? Has escrito una canción sobre ese día, ¿en qué se va a traducir esa producción?
- "Sin dudas para mí es la experiencia más linda, más fuerte y emotiva. Hay que estar en esa situación, en ese momento y en ese lugar para poder entenderlo y sentir que esa devolución que te dan tiene algo muy especial. Johnny Cash lo hizo, es más grabó un disco en la cárcel. Yo me propuse eso y espero poder concretarlo en este año. Les escribí una canción que estoy preproduciendo con Cacho Aiello y la quiero grabar este verano. Será parte de mi disco de tango y folclore que estoy grabando y que para marzo será editado. Me hubiese gustado poder hacer un show para despedir el año en la cárcel pero mis tiempos y las normas del penal no coincidieron, supongo."
¿Qué planes tenés para el año entrante?
- "Tengo muchos planes, lo cual no quiere decir que se puedan concretar todos. Me gustaría abrir las sesiones de ‘El mundo de los silencios’ y grabar todas las voces pero en inglés. Me gustaría llevarlo a Los Angeles, ese es un deseo más que un plan. Tengo que terminar, como dije anteriormente, mi disco de tangos y folclore que eso lo haré durante este verano. Es un material hermoso que grabé con músicos como Kuki Soria y un gran maestro que también me acompaña en la guitarra que es Sergio Gracioli, de Rafaela. También van a estar Alexis Verde y Ariel ‘el Chino’ Funes, porque son mis hermanos de la música y siempre tienen y deben estar en cada proyecto que emprendo. Empecé a componer las canciones del nuevo disco que quiero grabar con Mr. Mojo. Quiero reecontrarme con amigos de la música como Bonzo y otros más para volver a hacer cosas con ellos, y por sobre todo anhelo seguir creciendo, seguir aprendiendo. Yupanqui cuando llenaba la carta de inmigración en los aerpuertos siempre ponia de profesion: ‘Estudiante’ de eso se trata de alguna manera, avanzar y aprender.