El presidente de Federación Agraria, Eduardo Buzzi, anticipó que el próximo lunes harán un tractorazo en la ciudad de Rufino frente a Cargill para protestar por la situación del trigo. Además apuntó contra el ministro Boudou: “Que deje de tocar la guitarra y que se ocupe del campo”.
“El lunes a la tarde vamos a hacer una tractorazo en la ciudad de Rufino. Y vamos a terminar frente a la planta de Cargill. Hace rato que no se mueven los tractores en las pampas argentinas. Cargill es una de las grandes ganadoras de todo esto”, dijo el santafesino.
El ministro de Agricultura de la Nación, Julián Domínguez se reunirá el miércoles venidero con la Mesa de Enlace. Buzzi afirmó que “es natural concurrir en un proceso de discusión a la reunión. No ir sería anormal. Hay molestia dentro de las entidades porque ha pasado mucho tiempo y no se ha abordado el problema de la comercialización de trigo y del maíz. Se están generando condiciones de transferencia fenomenales a favor de las multinacionales. La realidad es que había más voluntad de ir a una protesta que a una reunión. Pero la sensatez indica que tenemos que ir”.
Por otro lado, el dirigente rural apuntó contra el ministro de Economía, Amado Boudou: “Esperemos que, además de tocar la guitarra, se dedique a ser ministro de Economía. Finalmente Guillermo Moreno depende de él. No es una pieza suelta dentro del Gobierno. Boudou no se ocupa del campo. Sus problemas son pagarle al Club de París, tocar la guitarra y ser candidato en la ciudad de Buenos Aires. Por eso, no hay que cargarle toda la mochila a Julián Domínguez. Esperemos que el ministro pueda mostrar soluciones para la comercialización del trigo. Que muestre cómo vamos a resolver los problemas de combustible, porque los gauchos hacen cola para poder llenar el tanque y eso obliga, al fin y al cabo, a pagar sobreprecios. Tienen que dejar de gobernar a favor de las multinacionales de exportación. Hoy hay un acuerdo Moreno-Cargill".
Finamente, Buzzi dijo que “los productores recibimos 60 centavos por kilo de trigo. Y el kilo de pan vale 8 pesos. Por eso vamos a empapelar las ciudades con una campaña para dar a conocer esto. Queremos que se conozca cuál es el nivel de influencia de los productores en la mesa de los argentinos. Ni hablar de las frutas. Hay situaciones escandalosas. Se está evaluando dejar las cosechas de duraznos en las plantas porque no se les puede pagar a los obreros. Y los consumidores terminan pagando 10 pesos el kilo de durazno. Hay un abuso de la cadena intermedia”.
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