Desde el año 2002 se lleva adelante el Complejo Recreativo para Adultos y Adultos Mayores (CRAAM), bajo la coordinación de la licenciada y profesora de Educación Física, Andrea Echavarría y en el ámbito de la Universidad Nacional de Villa María (UNVM).
Es así que un grupo importante de personas desde los 35 años concurren a la pileta y complejo recreativo del Centro de Empleados de Comercio (lunes, miércoles y viernes, para mujeres y martes y jueves, para varones) para participar de las propuestas de los docentes.
“El CRAAM nace con el objetivo de cubrir una necesidad: crear un espacio de recreación, esparcimiento, salud y contención para personas adultas mayores. Brinda actividades físicas, recreativas y sociales durante todo el año. Asisten mujeres de entre 35 a 89 años, jubiladas, docentes, amas de casa, profesionales todavía en actividad, abuelas… Mujeres activas que se dedican un momento para sí mismas, para su salud y bienestar”, explicó Echavarría, al fundamentar el proyecto.
Las actividades en temporada de verano incluyen gimnasia aeróbica, recreativa, localizada, correctiva y de rehabilitación; gimnasia respiratoria, relajación, natación, gimnasia en el agua, actividades socio-recreativas, salidas. En temporada de invierno continúan las actividades de gimnasia, caminatas y socio-recreativas, “las que se realizan con el motivo de afianzar los lazos afectivos que se generan en cada encuentro”
“En el campo de la educación, no interesa lo que el adulto mide, sino lo que vale”, concluyó Echavarría.

Testimonios

Algunas de las asistentes al programa dejaron sus testimonios:
Hebe Hillar: “Pienso continuamente cómo serían mis días, en esta etapa de mi vida, sin el CRAAM. Soy Hebe, socia fundadora, como suele llamarme ‘Buby’ (Echavarría)”.
Mary Ríos: “Tengo 58 años. Me motivó asistir a clases la actividad física y las relaciones sociales y humanas que se brindan, porque las dos cosas me hacen falta”.
Olga Mir: “Tengo 58 años, yo me sentía muy mal y una amiga me contó lo que hacían en el CRAAM, por eso decidí probar. Fue como un alivio para mi alma, mi cuerpo, porque me sentí libre. Además del compañerismo, encontré a una excelente profesional y una propuesta de actividades que no me había atrevido a realizar hasta ahora”.
Florencia Sol Díaz, 15 años: nieta de “Tita” Estario. “Mi nona siempre fue y es una persona muy activa, disfruta mucho del aire libre, de la pileta y de las reuniones; es por eso que creo que le hace muy bien participar en el CRAAM. Pienso que esta actividad abarca todas las cosas que le gusta hacer”.

Epígrafe: 1) El grupo posa feliz tras una jornada de actividades físicas y recreativas
2) Al agua. La pileta es el lugar de encuentro de los adultos que asisten al CRAAM en verano