IV (La rosa azul)
Alicia Giordanino
(de “La rosa azul”)
Raza de hombres,
de puertas y portones,
monjas y presidiarios,
baldíos y hogueras.
El Gran Presidente del Cosmos,
acudió con su alquimia,
con su oscuro traje
y manos remotas
que ofrecían
goce y progreso.
Por arte de magia
llegaron
poetas y ebanistas.
Oscilaban,
yendo y viniendo
como abejas
en el descubrimiento
de un dulzor trascendental.
* * * * * * * * * * *
VIII (Romance de las piedras)
Alicia Giordanino
(de “La rosa azul”)
Gema dorada
Dulzura del diamante
Espesura del aire
Gema trasformada
En mil nuevas gemas
En nuevas mariposas
Creadas y recreadas
Atraviesas
El vuelo de la hoja
Acariciadas
Los harapos del volcán
Desnudas a las águilas
Que rondan y atormentan
Picotean y se van
Solitaria gema
Larga meditación solar
Multitudinario racimo de
pasos
Descansan en tu almohadón
brillante
Y tú
Como si nada
Te aproximas
Al misterioso sabor del ocaso.
* * * * * * * * * * *
III
(De los cálidos úteros de América)
Alicia Giordanino
(de “La rosa azul”)
El pan del indio,
el que come en su casa de piedra
es también
una tajada de sol.
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