En nuestra edición de ayer, un mecánico mostró dos vehículos con la oblea de “aprobado” por la Inspección Técnica Vehicular (ITV), pese a las serias falencias.
Ante esa denuncia pública, Hugo Tello, responsable del taller que aprobó a esos coches, pasó por la Redacción a explicar las formas en las que se hace la Inspección.
En primer término, aclaró que las máquinas que controlan los vehículos “tienen un escaso margen de error. Si hubiera una equivocación, es humana, pero le aseguro que no me consta que la haya”, dijo.
“De todos modos, quiero decir que ofrezco a los interesados que vengan, que les hacemos el control nuevamente y así verificamos qué ocurrió”, señaló.
La denuncia pública menciona como ejemplo dos casos. En uno de ellos se menciona como ejemplo, las cubiertas lisas. “Hay que señalar que ese fue aprobado en julio del año pasado, lo que quiere decir que pudieron haberse deteriorado con el tiempo”.
En el otro caso, en el que cuestiona las modificaciones de un utilitario convertido en casilla rodante, Tello dijo que “eso no es materia de control del taller”.
En ese caso, también se habla de la defensa (caños protectores de la carrocería) no permitida en los controles. “Me llama la atención, porque eso se puede poner y sacar con facilidad. Hay que ver la foto que le hicieron en el ITV. Si las tenía en ese momento, quiere decir que hubo una falla nuestra. Si en cambio, la puso después, ya no tenemos nada que ver”, señaló.
“Estas denuncias no sólo me afectan laboralmente, sino familiarmente, porque mis tres hijos mayores están trabajando en el ITV”, agregó.
A la hora de explicar el funcionamiento del sistema, indicó que una vez que ingresa el vehículo y se cargan los datos en el sistema, pasa a la linea de inspección.
Tras la evaluación, pueden ocurrir tres cosas. Una, que se apruebe, otra que le otorguen un certificado condicional y, el tercero, que sea rechazado.
“Para aprobarlo, se permite por ley hasta cinco fallas leves, que están especificadas”, indicó Tello.
Si tiene más de cinco fallas leves “pero ninguna que afecte de manera crítica el funcionamiento, se le otorga un certificado condicional y un plazo de 30 días para que se realicen las reparaciones”.
En cambio, si las fallas son graves, directamente “se rechaza”, puntualizó.
El responsable del ITV señaló además que “en promedio, entre un 17 y un 18% de vehículos son rechazados, un porcentaje similar tiene un certificado condicional y el resto se aprueba”. Porcentuales que les parecieron lógicos debido a que la gente se llega al ITV cuando tienen el coche medianamente en condiciones.
“Nosotros en el año 2010 hicimos entre 10 y 12 mil inspecciones. Si hay dos autos con problemas, no es un mal promedio”, dijo.
Cabe señalar que Tello ya tiene funcionando los talleres de ITV de Río Cuarto, Marcos Juárez y La Falda, además del de Villa María, mientras que gestiona otros en 38 municipalidades.