Responsables, atentos y serviciales, son los encargados de proteger a los bañistas que -a diario- disfrutan la pileta de Atilra en su hermoso predio de la ruta 158.
Nicolás Cardielo (18 años), Iván Ortega (18) y Carlos Bergese (25), coordinados por Mayco Copponi (23), el encargado del grupo (foto), hacen su tarea casi en silencio, pero siempre con una sonrisa en los labios porque disfrutan de lo que hacen y sabiendo que los beneficiarios de su custodia se sienten seguros con ellos a un costado del espejo de agua.
Algunos son profes de educación física, otros sirven a la sociedad como bomberos, o realizan ambas tareas, y por eso se trata de jóvenes diestros, capacitados y físicamente aptos para desarrollar una labor que no es tan sencilla como algunos creen.
Son guardavidas, esa rara especie de hombres solidarios que sacrifican "su" verano y durante los meses en que la mayoría de la gente descansa, ellos se ganan la vida trabajando en las piletas de las dos Villas o sobre las márgenes del Ctalamochita.
Hoy les mostramos a estos cuatro amigos que desde el mediodía y hasta las 20 de cada jornada, de lunes a lunes, se encargan de hacer que nuestras vacaciones sean mucho más placenteras y sin peligros.