El legislador provincial y candidato a gobernador por la Coalición Cívica, Omar Antonio Ruiz, dio a conocer ayer en Villa María los tres ejes fundamentales sobre los que girará su propuesta, al tiempo que instó a la ciudadanía a participar, a empujar a la clase política al diálogo y al acuerdo.
Ruiz llegó a la ciudad acompañado por Marcelo Argañaraz, el presidente de la asamblea provincial, y fue recibido por dirigentes y militantes locales entre los que se contaban Juan Carlos Masiero, Eduardo Fernández y Juanjo Salgado.
Ruiz habló de sus propuestas para “una Córdoba institucional, una Córdoba social y una Córdoba productiva”.
Sobre el primer punto, señaló que ya tiene presentado en la Legislatura “un proyecto para una reforma institucional que permita y facilite la participación de la ciudadanía”.
A su criterio, la falta de interés de los ciudadanos en la política y la cosa pública “es culpa de los dirigentes, pero también de las mismas personas, que debe asumir la importancia de involucrarse y empujarnos al diálogo y al acuerdo”.
“Su reforma pasa por la derogación de los superpoderes, la vuelta a la bicameral y un cambio en el sistema electoral, porque no puede ser que con un 37% de los votos, el gobernador tenga un 53% de representatividad en la Legislatura”.
El cambio al sistema unicameral se realizó en los albores al “que se vayan todos”, como una manera de atemperar el clamor popular. “En un comienzo supuso un recorte del gasto, del 1,2% del presupuesto de la provincia al 0,6%, pero ahora ya alcanza nuevamente el 1%”, comentó, para especificar que, de todas maneras, “no proponemos volver a los 140 legisladores, sino a un número intermedio con los 77 actuales”.
Al referirse al segundo punto de su propuesta, sostuvo que “una Córdoba segura es posible si se resuelven los problemas sociales, con un Poder Judicial más eficaz ante los delitos mayores y con la mediación como herramienta en las faltas menores”.
Subrayó además su propio proyecto de nueva ley de educación, basado en la doble escolaridad, con el deporte y la cultura como barrera a la droga y otros flagelos. En el área de salud, apostó a la prevención a partir de la atención primaria.
Y sobre la Córdoba productiva, dijo que “hace falta un Gobierno nacional distinto, que saque las retenciones que le ponen actualmente a los productores, mientras que éstos se deben comprometer a acatar las leyes sociales, laborales e impositivas”.
“La producción minera debe ser apoyada siempre que no sea contaminante, con los estudios de impacto ambiental correspondientes. Y el Estado no puede seguir ausente en la materia, porque deja que lo resuelva el mercado.”

Alianzas

Argañaraz, en tanto, admitió que por estos días se están manteniendo contactos informales con otras fuerzas, entre ellas el juecismo, aunque advirtió que “la definición en la materia será adoptada a fin de mes, en el marco de la asamblea”.
“El juecismo está situado en el punto justo para aprovechar que la gente ya no se siente representada por el bipartidismo. Veremos si hay coincidencia programática para luego potenciarnos, si esto no ocurre, iremos solos”, aseguró el dirigente.