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Riggio es importante para el grupo y desea que sus compañeros más jóvenes exploten en un nivel superior |
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En el variado mundo del fútbol, hay jugadores que dicen poco, se ponen “el casete” y repiten frases hechas. Pero también están los otros, los que cuentan sus sentimientos, agradecen desde el corazón y exhiben su fortaleza anímica.
En este lugar se encuentra Renato Riggio, uno de los jugadores de Alumni con más experiencia, que llegó este año para contagiar buena onda, además de “poner lo que hay que poner” en la cancha.
El salteño no anda con vueltas y, aunque quizás prefiere irse temprano antes que pararse a declarar ante la prensa, se predispone con aplomo, sereno.
“Los números dicen que por ahora zafamos de todo y somos un plantel que pasamos por un buen momento, pero creo que hasta la última fecha no nos vamos a sacar la soga del cuello porque en esta clase de campeonatos, si perdés una seguidilla de puntos, volvés a estar donde estuvimos”, empezó aclarando el “Tanito”, en la charla que ayer mantuvo con EL DIARIO.
“Sabemos que no tenemos que relajarnos, además, los partidos que se vienen son los más difíciles porque lográs un equilibrio, estás más tranquilo que al principio y por ahí los equipos se relajan, entonces trabajamos para eso, los más grandes tratamos de hablar con los más chicos para mentalizarnos en seguir en el mismo camino”, agregó.
“Por ahí queremos hacer lo que hacen Estudiantes o Vélez, que no se cansan de ganar, salvando las distancias, por supuesto”, graficó luego.
Disfrutar
Más allá de las presiones, Riggio sostuvo que “todo el plantel está empezando a disfrutar lo que significa estar bien, haber logrado un gran grupo y conseguir resultados; de otra manera, el fútbol se sufre más de lo que se disfruta”.
¿Qué es lo que más te gusta de Alumni?
“El grupo. La verdad, me ha sorprendido. Se ve que es joven, que necesitaba de jugadores grandes como Sergio (Zanabria), Luciano (De Bruno) o el mismo Leo Abálsamo, que desde la experiencia guían un poco más a los pibes. Sabemos que por ahí es complicada la vida de jugador de fútbol, sobre todo de joven, ya que tenés todo y la mayoría no lo aprovecha; sólo lo aprovechan los grandes, los cracks, pero acá estamos para guiarlos y ayudarlos adentro de la cancha, para estar más tranquilos, más maduros, para no desbordarnos cuando se está en desventaja, algo que se vio en Maipú. Además debemos sostener los partidos cuando se va ganando, sobre todo ahora que son todas finales. Pero seguramente nos van a jugar diferente. Ya se dieron cuenta que Alumni ha cambiado mucho la mentalidad de los once que están y los que entran desde el banco. Nos convertimos en un equipo fuerte, sobre todo de mitad de cancha en adelante. Estoy contento por eso.”
Los jugadores que estaban de antes elogian a ustedes que llegaron con esa mentalidad. Igual, para ello, ustedes deben sentirse bien en el lugar donde llegan...
“Sí, la verdad. Antes de venir averigüé con otros amigos que son de acá. Me dijeron que es una institución denominada chica, pero con muchas ganas de crecer. Entonces la única forma de crecer es mantenerse en el Argentino A o estar en la B Nacional. Alumni debe hacerse grande y no porque se lo llame equipo chico, no se merezca estar en la B Nacional en algún momento.”
“Pero yo estoy agradecido de los pibes de acá, que nos abrieron las puertas a los grandes y nos insertaron rápidamente, entonces destaco la formación del grupo y la unión, sobre todo.”
“Yo siempre me destaqué por ser el alegre del grupo, por guiar a los chicos. Y en eso estamos. Tal vez algunos jugadores de acá no se den cuenta del potencial que tienen... Jugadores como Manicero, ‘Falucho’ Herrera, Román (Strada) y Matías Bolatti, por ejemplo, tienen un potencial tremendo. Uno los ve jugar y realmente te dan ganas. Ellos no tendrían que estar acá. Y los Caler, los Díaz son muy jóvenes y están afianzados en un Argentino A; eso es importante porque hoy en el fútbol tenés un año muy bueno y te puede cambiar la vida.”
“Villa María es una ciudad chica, muy tranquila y por eso ellos deben saber que no tienen techo. Y quizás ni siquiera primera división es el techo de algunos jugadores de acá; lo digo porque uno los ve. Quizás les faltaba una sumatoria de resultados positivos para que ellos tengan confianza en sí mismo, ya que el jugador, por más calidad o categoría que tenga, funciona distinto cuando de la cabeza no se encuentra bien, por eso necesitábamos de este buen momento”.
De primera
Riggio jugó en diferentes niveles superiores del fútbol argentino. Vistió las camisetas de Independiente, Instituto, Olimpo, entre otras, y si bien ahora viene de jugar el Argentino B, para Gimnasia y Tiro, parece haber encontrado un nivel interesante, a punto de cumplir 33 años.
“El hecho de jugar en el Argentino B fue por una elección personal, ya que estuve mucho tiempo afuera de mi provincia, entonces quería quedarme en Salta y jugar en el equipo que me dio la posibilidad de llegar a primera y del cual soy hincha, además quería jugar un par de años más y retirarme en esa institución”, comentó. Luego añadió: “Gimnasia está peleando el ascenso y creí que estar ahí era importante, pero después las cosas cambiaron; tuve diferencias con el técnico, entonces debí cambiar; tuve posibilidades de ir a Venezuela, pero Víctor me conoce, sabe lo que puedo dar y me llamó. Igual es algo recíproco; cuando estaba en Gimnasia y Tiro, él me dio una mano y me llevó. Entonces trato de devolverle la confianza y de agradecerle”.
El “Tanito” también agradeció “a la dirigencia de Alumni porque por ahí se puede decir que uno viene del Argentino B y puede dejar dudas”.
“Encima estaba sin pretemporada; llegué casi al último, aunque sé que físicamente puedo dar más, quizás me falten 20 minutos del segundo tiempo porque hacía siete meses que no jugaba”, admitió. No obstante, dijo estar “contento porque estaba convencido que si tenía que jugar en el Argentino A iba a rendir; ahora me siento en un buen momento y le soy útil al equipo”.
Por otra parte, indicó: “Siempre tuve un físico diferente y eso me ayudó a jugar en primera, entonces no me cuesta tanto. Simplemente uno necesita confianza y los resultados ayudan a estar bien de la cabeza”.
En cuanto a su forma de vivir el fútbol y de contagiar a sus compañeros, el “Tanito” comentó: “El año pasado estuve mucho en el banco y lo mismo traté de tirar para adelante en Gimnasia. Y a mi edad no me voy a hacer mala sangre, simplemente me gustaría que de acá a un par de años pueda ver a Manicero de nuevo en primera; a ‘Falucho’ y a Román jugando en Europa... Me daría una satisfacción enorme, como ahora veo que compañeros que tuve en Instituto juegan en México. Eso me llena, soy mucho de fijarme en la persona”.
Con confianza
Alumni, que marcha muy bien en el aspecto ofensivo, enfrentará el martes a Racing, equipo que viene con un buen rendimiento defensivo. Sin embargo, el “Tanito” relativiza los antecedentes.
“Estudiantes le venía ganando a todos, le había convertido tres a Talleres y sin embargo se sorprendieron”, apuntó.
“Cada partido es diferente y Víctor es el estratega del grupo, sabrá cómo hacer las cosas, mientras nosotros, gracias a Dios, lo entendemos a la perfección, además, él tiene una gran intuición sobre cómo se pueden dar los partidos y nos ayuda mucho”, agregó.
Además, el volante consideró que el resultado en Río Cuarto “pudo ser más abultado” en favor de Alumni. “El árbitro les dio un penal y nos echó un jugador como para equilibrar el partido porque la verdad que ellos estaban desbordados”, aseguró.
En ese aspecto, el Riggio jugador no duda: “Este equipo va a sorprender a más de uno y todos vienen analizando que somos el único invicto de la Zona en el año. Nos hacen goles, es cierto, pero corremos ese riesgo por la cantidad de situaciones que concretamos y porque estamos pasando por una efectividad tremenda y los tres delanteros están en un buen momento, entonces ahora nos van a respetar”.
Por último, deslizó: “No creo que Racing nos venga a cambiar golpe por golpe porque se le va a complicar; calculo que nos irán a esperar, pero estamos muy bien, sabemos cómo jugar y ahora ya no depende de los rivales, sino de cómo juguemos nosotros”.
A la "Placita"
Si el tiempo lo permite, el plantel de Alumni realizará hoy por la tarde la práctica de fútbol en Plaza Ocampo, pensando en el partido del martes, ante Racing.
En cuanto al equipo, hasta ahora, sólo se avisora una variante obligada, ya que el defensor Alexis Díaz llegó a la quinta amarilla y deberá cumplir una fecha de suspensión, al igual que Lautaro Pérez, expulsado en Río Cuarto luego de entrar desde el banco.
En tanto, otro defensor, Gastón Molina, espera recuperarse bien del ojo derecho, ya que padece una molestia después de sufrir un pelotazo en el duelo ante Estudiantes.
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