Cinco personas comparecieron ayer por la mañana en la Cámara del Crimen del quinto piso de los Tribunales locales para brindar sus testimonios en el juicio que se le sigue al suboficial de la Policía de la provincia de Córdoba Mauricio Félix Vicente, acusado de ser autor de "homicidio culposo" de un menor de 16 años de edad que circulaba en una moto sobre la ruta nacional 158.
Se trata de los motociclistas Varas y Arroyo, quienes venían detrás de la Zanella 50 en la que viajaban Eduardo Benítez Cáceres (16) y Jorge Daniel Argüello (17), el primero fallecido en el episodio y el segundo gravemente herido en aquella oportunidad; los efectivos policiales Marzo, quien realizó el croquis, y Moyano y un bombero de apellido Santi.
Con algunas pequeñas diferencias - cabe recordar que pasaron casi nueve años del trágico hecho - las declaraciones de todos coincidieron en señalar la falta de iluminación en el lugar, la ubicación de los cuerpos y el impacto del patrullero, la falta de señalización y otros detalles.
Sólo quedan unos pocos testigos que deberán comparecer. El proceso pasó ahora a cuarto intermedio hasta el próximo 11 de marzo, oportunidad en que atestiguará el perito accidentológico, quien por estos días se encuentra de vacaciones.
Es oportuno recordar que el caso está siendo juzgado por la camarista Silvia Saslavsky de Camandone, y quien sostiene la acusación es el fiscal de Cámara Subrogante, Francisco Márquez.
La defensa del policía está a cargo del letrado de la ciudad de Córdoba Ariel Fernández, mientras que patrocina al Estado provincial, en lo que concierne a la acción civil, la procuradora Laura Rüedi.
En tanto, representa a la familia del menor fallecido en la querella particular, en lo penal y lo civil, Oscar Romano, también abogado de la ciudad de Córdoba; al tiempo que el villamariense Luis Caronni tiene a su cargo la querella del joven que resultó herido de gravedad.

El hecho

Benítez Cáceres y Argüello viajaban en la misma moto aquella madrugada, cuando entre Pozo del Molle y La Playosa, y desde un camino lateral, subió a la ruta un jeep de la patrulla policial mollense, a cuyo volante se encontraba el suboficial Vicente, acompañado de José Antonio Torres.
En esa circunstancia se produjo el impacto que dejó tendido a Benítez Cáceres sobre la ruta 158, mientras que su acompañante "voló" por el aire.
La moto no tenía la luz de prevención roja correspondiente a la parte posterior, aunque sí el faro delantero.
Los policías, también surge de la instrucción, no señalizaron el área del accidente ni retiraron a los motociclistas, por lo que poco después se produjo un segundo impacto, esta vez protagonizado por el Fiat 128, que conducía el periodista de Las Varillas, Raúl Marcelo Salas.
El coche, que se desplazaba hacia Las Varillas, embistió primero al jeep policial y luego a Benítez Cáceres, quien llegó sin vida al Hospital.