El fútbol, un juego que estimula sentimientos muy arraigados, muchas veces te genera volver a sentir emociones que no tienen antecedentes, ni las mismas realidades, pero que muchas veces presentan el mismo sentido.
De esta manera, uno de los villamarienses que más hermosuras brindó desde su talento a este deporte, que provocó admiración y recelos, que incitó elogios y críticas a través de una personalidad que sólo tienen los rebeldes, esos que saben que, dentro de un campo de juego podía, en una fracción de segundos, otorgar algo imprevisto, diferente…
Y, como mueca del destino o por una cuestión de decantación ante el simple y complejo hecho de vivir alrededor de una pelota, retornó a donde todo empezó, al baby fútbol, aunque sea una aventura totalmente diferente y que no tiene asimilación alguna, porque esta vez no es protagonista, sino que está en la función de enseñar y brindar su experiencia a niños que, como él en ese entonces, están empezando a disfrutar del placer que significa jugar al fútbol, más allá de los resultados y la competencia.
"Estoy muy orgulloso de volver al club después de nueve años, y si bien ya dirigí en primera (en Unión Central y Los Zorros), los chicos son otra cosa, así que estoy feliz y con las ganas de tratar de dar lo mejor", comenzó expresando Marcelo Santoni en la interesante charla de su actualidad y del fútbol que realizó ayer con SEMILLERO.
"Hacía más de un año que estaba alejado, sin trabajar, creo que al ser muy conocido acá siempre estoy en la mira de los demás, más que otros técnicos, así que tuve esperar y me llegó la oportunidad del club del cual soy hincha y al que le di todo como jugador", remarcó a continuación.
Justamente, sobre el hecho de conducir planteles del fútbol infantil, Santoni, entre otras cosas, describió: "Tengo la escuela de los Alamo, tanto de Marcelo como de Jorge, que saben lo que es dirigir a chicos y, más allá de que no voy a ser ni las uñas de ellos, voy a tratar siempre de mantener la misma línea: el respeto, que los chicos se diviertan y que jueguen al fútbol".
"En el baby ya sabés que cuando enfrentás a All Boys, Argentino o Española, que hace años que están jugando, es difícil... Los chicos de Alumni están jugando por primera vez y hay que enseñarles de a poco, despacio", manifestó en cuanto al trabajo diario con los niños y recalcó que "lo que más les inculcó es el compañerismo, el respeto hacia el compañero, al rival y hacia los padres. Por ahora, eso es lo más importante".
Mientras tanto, ante la consulta si los niños que dirige conocen de su etapa como jugador, explica, con humor, que "no mucho" pero reconoce "que algunos padres les han dicho que fui jugador de fútbol". Sin embargo, explica que "sé quién fui como jugador pero ya no juego más, así que, cuando dirijo, siempre respeto al jugador, que es lo mejor que hay en el fútbol".
"Por lo tanto, no me pongo en el rol de que 'yo fui el mejor o el peor', sino que todo lo que aprendí de los mejores ahora intentó brindárselo al jugador", redondeó.
Por su parte, el ex jugador "fortinero" recordó su época en el baby y comentó: "El baby me dejó lo más lindo de un chico, ir a jugar al fútbol todos los domingos con compañeros. Además tuve la suerte de jugar en un gran equipo, la '72 de Bancaria, ja... Pasé momentos brillantes, son etapas muy lindas y que cada chico tiene que disfrutar".

En inferiores

"También estoy muy contento de estar en inferiores junto a Juan (Cardozo), con quien hacemos una dupla hermosa porque tenemos la misma personalidad, los mismos códigos, y pensamos igual: lo mejor para el club", dio a conocer Santoni sobre su otra función en el fútbol juvenil de la entidad fortinera.
Por lo tanto, explica que junto con Cardozo buscan inculcar que "el valor del respeto al compañero, que el jugador que no entrena no juega y que estén bien físicamente porque así el que juega bien siempre va a sacar ventaja".
Igualmente, indica, que como siempre pasa en el fútbol "el que juega bien se hace a veces el vivo para los trabajos físicos, por lo que, con Cardozo logramos hacerles entender cómo es esto y vamos por el buen camino. Estamos muy contentos por las ganas de los chicos".

Corazón "fortinero"

En otro punto de la charla, Santoni destacó el hecho de que varios ex jugadores del club tienen su lugar y expresó: "Estamos en el club tipos que hemos defendido la camiseta con mucho amor y honor, tanto uno, como Juan Cardozo, el "Caía" (Amarilla), Gustavo (Miranda) o el mismo (Ariel) Palacios".
"Trabajamos todos por la misma senda, nos hablamos, a tal punto que hoy (por ayer) hicimos fútbol con la primera local que dirige Gustavo. Creo que todo esto es muy bueno", sostuvo.
En tanto, también elogió la actualidad de la institución: "El predio está muy lindo, la cancha de baby es hermosa... A los chicos les digo que valoren el hecho de tener ropa y fútbol para entrenar, porque cuando yo estaba no había ni un caramelo, así que deben aprovechar esto".
"Estoy muy feliz por el regreso al club y le agradezco al "Panadero" (Adrián López) por haberme abierto las puertas después de tantos años y espero no defraudar", comentó.
Actualidad

Por su parte, Santoni también brindó su punto de vista sobre la realidad del fútbol infantil a nivel general y describió: "El gran problema del fútbol infantil son los padres porque se quieren salvar con su hijo, en lugar de ir a alentarlo o darle buenos consejos. Recuerdo que en el baby o en inferiores, cuando dirigía Marcelo (Alamo), no volaba una mosca, había un gran respeto de los padres hacía el técnico y entonces trato de seguir ese camino".
En ese sentido, dio a conocer que su hijo (Franco) siempre "me dice que soy 'el único padre que le dice al hijo que no es bueno' y es así porque yo no le miento a él, no lo digo sí es bueno o malo, sino que juegue y aprenda porque el técnico que tiene es el que le debe enseñar".
Y, a continuación, habló sobre otra problemática y es la falta de preparación en el fútbol juvenil, ya que "hay chicos que no tienen idea de lo que es el conocimiento del juego, no saben la posición o, con 15 años, ni cabecear. Es un problema que influye mucho en el fútbol actual y hay que corregirlo".
Por último, ante la consulta de si es difícil ser un ex jugador, el "Loco" explicó: "Para muchos creo que sí, pero para mí no. Disfruté como jugador y podría haber dado muchísimo más, pero cuando uno se equivoca... Hoy tengo esa experiencia y entonces trato con mi hijo o con los jugadores que conduzco de enseñarles a no cometer los errores que uno tuvo en su vida".
"Disfrutó de esta realidad, me gusta entrenar, estar con los chicos y enseñarles. Realmente no extraño la etapa de jugador, por supuesto que si me dan la chance de pedir un deseo, volvería a tener 20 años, pero igualmente hoy por hoy estoy muy feliz."