El fiscal de Instrucción de Marcos Juárez, Carlos Viramonte, resolvió ayer a la mañana imputar por homicidio a Marcelo Filipuzzi, por el crimen de Lidia Cano, ocurrido el jueves pasado en la localidad de Leones.
"La sospecha estaba, pero no alcanzaba para una acusación formal", aclaró Viramonte, quien además agregó que la medida se decidió después que testigos vieran el vehículo de Filipuzzi en la zona donde se encontró el cadáver de Cano, además de pertenencias.
Cabe mencionar que el pasado 10 de marzo se presentó en la Comisaría de Distrito Leones, Benito Acosta, de 46 años, quien denunció la desaparición de Cano, su esposa. Las sospechas en torno al productor agropecuario se generaron a partir de conflictos laborales que mantenía la mujer fallecida con su patrón, quien es el único imputado por este crimen.

Vino por sus hijos

Oscar Sandoval, ex esposo correntino de Cano se presentó en la víspera en los Tribunales de Marcos Juárez, para solicitar la tenencia de uno de sus tres hijos, uno de ellos sordomudo, quien se encontraba viviendo junto a Cano y Acosta.
En 2006, Sandoval y Cano dejaron Saladas, pueblo ubicado a 100 kilómetros de Corrientes capital, para viajar a Río Negro a trabajar, junto a sus tres niños, uno de los cuales es sordomudo, informó Redpanorama en su edición digital.
Estando en la sureña provincia, Cano abandonó el hogar junto con Acosta, quien también residía en el mismo pueblo rionegrino.
Al poco tiempo, y por medio de la Justicia, Sandoval recuperó dos de los niños, menos al menor, que es el sordomudo y a quien el correntino vino a buscar.