Entre todas las definiciones de masonería, Angel Jorge Clavero y Nicolás Orlando Breglia, gran maestre y pro gran maestre de la organización, eligieron la de “una escuela de conducta y conocimiento, dado que un masón debe tener una ética intachable toda su vida y no dejar de incorporar conocimientos hasta su muerte”, indicaron.
Las máximas autoridades de la masonería argentina están desde ayer hasta hoy en Villa María, con el objetivo de acompañar el primer paso del grupo local que pretende retomar la logia “El Kosmos”, que lleva el número 236 en la organización y que en su tiempo integró don Amadeo Sabattini.
Además, ayer plantaron una acacia, símbolo de la masonería, en la plaza Independencia y se entrevistaron con el intendente Eduardo Accastello, a quien calificaron de “muy abierto y democrático”.
La masonería nació de un grupo de constructores, albañiles y arquitectos en 1717. El oficio masculino en esa época hizo que la masonería se constituyera como una organización reservada exclusivamente a hombres. “Hoy esas reglas van cambiando. Hay logias femeninas en Argentina y trabajamos juntos en varias actividades. Somos defensores de la igualdad y mal podríamos apoyar la exclusión de las mujeres”, indicaron.
Los masones integran logias y se dan el tratamiento de hermanos entre pares. Se reúnen en “templos o talleres de ideas”, donde discuten temas de la sociedad y tras la elaboración de conclusiones, las impulsan como ideas a los partidos políticos para que se elaboren políticas públicas.
“Somos en Argentina los impulsores de la Ley de Educación Laica, Gratuita y Obligatoria. Somos también los que trabajamos la reforma universitaria”, señalaron, para ejemplificar algunos de los proyectos que pudieron materializar.
Actualmente, procuran crear cátedras de libre pensamiento en las universidades. “Ya está la de la Universidad de Buenos Aires y esperamos poder impulsarla acá también”, indicaron.

Relación con la Iglesia

Aclararon que no tienen ningún ámbito de competencia con la Iglesia Católica. “La masonería se desenvuelve en un ámbito terrenal y temporal. No discutimos la existencia de Dios. Lo que pasa es que, cuando la Iglesia quiere abarcar ese ámbito civil, puede haber controversias. Nosotros creemos que todas las religiones son válidas y personalmente, ambos somos católicos. No hay incompatibilidad”, aclararon.
“Si hubo enfrentamientos, no provinieron de nosotros. En general, son los sectores dogmáticos los que nos cuestionan. Acá en Argentina y en todo el mundo”, remataron.

Valores

Uno de los principales valores que defienden es que las ideas no están preconcebidas, sino que se construyen. Son defensores también de los derechos humanos y enemigos del establishment.
Desde los miembros de la Primera Junta, pasando por José de San Martín y llegando al poeta gauchesco José Hernández, todos fueron masones. Y hay más en la actualidad, pero por respeto a la historia, sólo lo mencionan con el paso de los años.