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El fiscal en lo Correccional de los Tribunales locales, Horacio Vázquez, subroga al titular del Ministerio Público, Francisco Márquez, quien se apartó de intervenir en este proceso |
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Un jornalero oriundo de la localidad de Ticino comenzó a ser juzgado ayer en los Tribunales de Villa María, acusado de haber abusado sexualmente de una menor de su entorno familiar entre febrero y noviembre de 2009.
Jorge Omar Díaz, de 40 años, comparece imputado como presunto autor de “abuso sexual con acceso carnal”, calificado (por el vínculo) y continuado (por el transcurso del tiempo), un delito que es castigado con una pena que va desde los ocho a los 20 años de prisión.
La supuesta víctima es una chica que en agosto próximo cumplirá 16 años, pero que al momento de ocurridos los hechos denunciados tenía 13 y 14 años.
Díaz se encuentra detenido desde el 19 de noviembre de aquel año, horas después que la madre de la menor en cuestión radicara la denuncia correspondiente en la sede policial ticinense, tras lo cual tomó intervención el fiscal Gustavo Atienza, a cargo de la instrucción de la causa.
Puertas cerradas
Como los hechos que se investigan son de instancia privada, en los que además la víctima es una menor de edad, el debate se realiza a puertas cerradas, es decir, sin el acceso del público ni de la prensa a la sala de audiencias que la Cámara del Crimen villamariense posee en el quinto piso del Palacio de Justicia local.
Sin embargo, pudo saberse que Díaz se abstuvo de declarar y que luego comparecieron seis testigos, en su mayoría docentes de la escuela a la cual asiste la adolescente supuestamente abusada.
Cabe señalar que durante la instrucción de la causa, la menor complicó seriamente la situación procesal del acusado al declarar en Cámara Gesell y ratificar lo que previamente había denunciado su mamá.
Más testigos
Para hoy está prevista la recepción de otros seis testimonios y se estima que el juicio concluirá mañana con los alegatos de las partes y el dictado de la sentencia.
El debate oral es presidido por el camarista René Gandarillas y cuenta con la participación del fiscal subrogante Horacio Vázquez y de los abogados locales Lorenzo Gilli y Gustavo Murugarren (codefensores de Díaz), mientras que el secretario actuante es Roberto Jue.
Según trascendió, el presunto violador es casado y separado, tuvo nueve hijos con su esposa y una pareja posterior, y al momento de ser detenido estaba viviendo en concubinato con una mujer, madre de tres hijos.
Los graves hechos que se le atribuyen habrían ocurrido en la localidad de Ticino en fechas no precisadas, pero entre febrero y noviembre de 2009.
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