Una vez más la Municipalidad de Villa María quedó en el ojo de la tormenta por su política respecto a los animales callejeros, a raíz de posteos de vecinos en la red social Facebook a través de los cuales aseguraban que la comuna mataba a los perros que deambulan por la vía pública.
Las versiones llegaron incluso al semanario El Regional, lo que llevó a EL DIARIO a consultar ayer al secretario de Gobierno y Relaciones Institucionales, Rafael Sachetto, quien negó de manera tajante una matanza.
“Invitamos a nuestros ciudadanos a visitar el Albergue Canino para que se saquen las dudas que tengan”, fue la primera respuesta del funcionario ante la pregunta de este matutino.
Sachetto indicó que en diciembre había 120 perros en el albergue situado a un costado del basural, en el predio ubicado camino a Ana Zumarán, y hoy hay 170.
“La población canina ha aumentado considerablemente. Esto causa un crecimiento en el gasto en alimentos, medicamentos e insumos que parece nadie tener en cuenta”, resaltó.
“Es cierto que el municipio sale a recojer animales, pero de ninguna manera es para matarlos. Se harán responsables de esas versiones quienes las hagan correr de manera irresponsable e injusta”, cuestionó el integrante del Gabinete de Eduardo Accastello.
Sachetto recalcó que la presencia de animales callejeros causa diversos inconvenientes en la vía pública.
“Si hay perros sueltos hay peligro de mordeduras y de caídas de ciclistas o motociclistas”, precisó.
Además, dijo que la presencia de los canes en espacios verdes y otros lugares de común acceso de los ciudadanos “puede acarrear patologías relacionadas a los parásitos”, por lo que “existe una responsabilidad sanitaria en la materia”.

Los guardianes

Además de los perros que deambulan por las calles y que no poseen dueño, también existen muchos otros que son utilizados por sus amos como guardianes, y que suelen estar en las veredas de sus domicilios, provocando sustos y problemas a ocasionales transeúntes.
Es común ver en barrios como el Vista Verde de esta ciudad a perros guardianes salir de sus casas “a la caza” de ciclistas, motociclistas y personas que corren.
En este sentido, Sachetto admitió que se reciben en la comuna “muchísimas denuncias” de vecinos ante estas situaciones.
“En veinte minutos llegamos al lugar desde el cual provienen las denuncias y muchas veces identificamos al animal y sale su dueño a reclamar la propiedad del perro”, contó el funcionario.
“Le hacemos las recomendaciones necesarias y le advertimos que la próxima vez nos llevaremos a su perro”, apuntó el ex concejal.