@ Un cuento chino: estreno nacional

El guionista y director Sebastián Borensztein (hijo del recordado Tato Bores), había leído diez años atrás en las páginas de un diario que una vaca inexplicablemente había caído del cielo sobre una balsa en un lago de China, dando muerte a una muchacha y salvándose el joven que la acompañaba.
En los habituales almuerzos de los miércoles que comparte con el actor Ricardo Darín, se empezó a tejer una película inspirada en aquella extraña noticia, convirtiéndose en la segunda producción del realizador de "La suerte está echada".
Con dosis de humor negro, la ficción relata cómo el joven asiático arriba a nuestro país sin hablar un palabra en español, donde se encuentra con un ferretero y ex combatiente de Malvinas (Darín). El ex protagonista de la premiada "El secreto de sus ojos" interpreta a un ser obsesivo por contar los tornillos, que calcula que la cifra de elementos dé igual a lo que dicta la caja.
"Estamos en Argentina y siempre faltan", refunfuña. Cascarrabia, resentido y malhumorado, el personaje de Darín representa al hombre medio traicionado por el sistema, aislado del mundo y autoexiliado en su propia casa. Las dos tragedias, el chino y el argentino, se unen con distintas nacionalidad. Mientras, el porteño debe encontrar un lugar para el chino Jun (Huang), al que las autoridades no dan cabida y debe alojarlo en su casa.

@ El discurso del rey

Tras la muerte del rey Jorge V (Michael Gambon), el 20 de enero de 1936, y la escandalosa abdicación del príncipe Eduardo VIII (Guy Pearce), producto de un enamoramiento de la estadounidense y dos veces divorciada Wallis Simpson, su hermano Jorge VI (Colin Firth), apodado Bertie, se convirtió en el rey más poderoso de la tierra. Pero cuenta con un pequeño problema que lo angustia terriblemente: su tartamudeo.
Bien "british" al igual que el filme "La reina", "El discurso..." relata las desventuras de Jorge VI, antes duque de York, y su terapeuta Lionel Logue (interpretado por el gran Geoffrey Rush), un excéntrico actor fracasado que le ayudará a mejorar sus problemas de tartamudez.
El conflicto formal se plantea en un contexto de la Segunda Guerra Mundial (vale señalar como observación que una afectación en la voz, seguramente sería menos dramático que la pérdida de la vida de un soldado británico en plena acción, pero bien, el filme no ahonda en esa problemática).
Asimismo, dicha anécdota se supera para inmiscuirse de lleno en la trama pergeñada entre el excéntrico logopeda -el asistente- la esposa del rey, Isabel (Helena Bonham Carter) y el protagonista, quienes establecen una relación de tirantez, pero al mismo tiempo inquebrantable. Tras un choque inicial, ambos soberanos se sumergen en una terapia poco ortodoxa, contemplada por su familia, su gobierno y el primer ministro Winston Churchill (Timothy Spall), para que el rey supere su afección y pueda pronunciar un discurso radiofónico que inspirará a su pueblo y lo unirá en la batalla. La película "El discurso del rey" obtuvo doce nominaciones a los Oscar y ganó cuatro: a la Mejor Película, Mejor Director (Tom Hooper), Mejor Actor (Colin Firth) y Mejor Guión Original (David Seidler).

@ El rito: inocua

Basado en hechos reales y tomando como base la novela de Matt Baglio, "El rito" desaprovecha por completo todo el antecedente experimental, creado desde "El exorcista" de William Friendkin, proyectada en el año 1973 y todas sus sagas.
Sin la tensión lógica que puede plantear el género, el filme sólo se remite a la inseguridad de un seminarista (Collin O'Donoghue), que dudando de su fe es mandado al Vaticano para que realice un curso sobre exorcismo. Bajo el mismo planteo, de laicismo y ciencia versus creencia y religiosidad, el joven incrédulo debe conocer a Lucifer para recién creer en Dios. Sencillo, y tal vez inocuo, en una película que se vale de los pergaminos de Anthony Hopkins como atractivo, que realiza un papel acorde a lo esperado con reminiscencias de Hannibal Lecter.

Víctor Alvez