Los concejales ya reunieron toda la documentación relacionada con el conflicto suscitado en 2010 entre el subsecretario de Seguridad Ciudadana del municipio y la jueza de Faltas, y se aprestan a emitir un dictamen sobre el particular.
Al menos verbalmente, los legisladores locales ya anticiparon en privado sus conclusiones sobre la encendida polémica que protagonizaron Fabián Pastorak y Lilián Sosa.
Todo había comenzado cuando el funcionario dijo en EL DIARIO que la magistrada tendría que haber clausurado geriátricos con rapidez tras procedimientos llevados a cabo desde la Subsecretaría a su cargo. En una nota que Sosa envió al Concejo Deliberante poco después, hizo duras apreciaciones sobre el trabajo de Pastorak, haciendo hincapié en actas mal labradas por los inspectores y hasta deslizó hechos de corrupción.
En agosto de 2010, por unanimidad el cuerpo legislativo resolvió crear una comisión investigadora sobre el tema, con el presidente del órgano, Mauro Bizzarri y los titulares de las tres bancadas legislativas, como miembros.
Ocho meses después llegaría la conclusión.
De acuerdo a las fuentes consultadas por este diario, los ediles resolverían dictaminar apelando a que ambos funcionarios trabajen de manera coordinada, y el documento final suscripto por los concejales (aún no elaborado) no cargaría tintas contra ninguno de los dos, sino que se centraría en un espíritu conciliador y de exhortación a una labor en conjunto.
“Ambos se acusaron mutuamente en base a la misma documentación. Nosotros creemos que la jueza demoraba en avisar al funcionario que las actas llegaban al juzgado de manera incorrecta, y que Pastorak no pedía asesoramiento ni consultaba” a la magistrada, dijo una fuente parlamentaria. “Creemos que ya han limado asperezas y trabajan bastante bien actualmente. El enfrentamiento fue político”, consideró la fuente.