En el corazón del barrio Rivadavia, uno de los pioneros en el expendio de repuestos, desarrolla su labor aunque desde un costado diferente.
Miguel A. Mulinetti, con 52 años de trayectoria ininterrumpida, ha encontrado que los nuevos tiempos han potenciado su especialidad en bombas y salidas de agua para camiones, motores y tractores.
Hoy en su negocio de calle Las Heras, el experimentado repuestero además de atender la demanda de nuevos productos, pone toda su sapiencia en el desarrollo de repuestos que ya no se consiguen en el mercado.
"En nuestro negocio no sólo se repone sino que además reponemos y construimos", afirma Mulinetti en diálogo con EL DIARIO.
"En definitiva, fabricamos lo que no se consigue", subraya el entrevistado por este medio.
"Después que el Gobierno determinará el cierre de la importación, nosotros estamos cubriendo los nichos que se producen", explicó el repuestero.
"La gente que tiene tractores, cosechadoras o grandes maquinarias, quiere los repuestos inmediatamente ya que los necesita para no interrumpir su producción", agregó.
"Hoy casi nadie repara, todos quieren repuestos nuevos pero no siempre se pueden conseguir. Ahí entramos nosotros", también dijo.

Viaje en el tiempo

Uno de los detalles más notables del negocio encabezado por Mulinetti tiene que ver con la manufactura de piezas pertenecientes a vehículos antiguos.
“Nosotros estamos en condiciones de reproducir una salida de agua de un Ford T modelo 1914”, asegura sin titubeos Mulinetti en la charla mantenida con este matutino.
Apreciado por el ámbito de los coleccionistas privados y también por el de los restauradores de automóviles construidos el siglo pasado, el local de calle Las Heras, se transforma en paso obligado para los amantes y entendidos en la actividad.
“Viene mucha gente y se hacen pedidos especiales. Días atrás fabricamos el cuerpo de la bomba de un Fiat 1100 y la salida de agua de un Ford T”, comentó el entrevistado.
Vale destacar que para el logro de la pieza deseada, se realiza un exhaustivo estudio de las características del vehículo y hasta de la historia del auto.
“Cuando llegaron los primeros Ford a la Argentina se les adaptó el sistema de agua. Nos basamos en aquella modificación para diseñar el nuevo repuesto ”, indica con plena seguridad el trabajador.
“La adaptación del sistema, se decidió por las distancias que en nuestro país debían recorrer los vehículos”, anexó el experto en reconstruir repuestos que se ganó un relevante lugar en el mercado proponiendo un servicio original para su clientela.