Te tengo. Te atrapé sonriente, muchacha de 60 primaveras, floreciente mujer de las causas y los azares, reparadora de los sueños postergados, de los sueños de los postergados; zamba y samba, candombera en todas las movilizaciones, sonriente en la lucha y sin perder la ternura jamás.
Te tengo. Te atrapé tomando prestados unos choclos al pasar, para cocinar para todos, para compartir con todos y con el perdón de Santa Julia Tinto. Salud.
No encontraba forma alguna de comenzar estas líneas, hasta que me dijeron que el Dani había escrito en su muro de Facebook unas palabras profundas como un aljibe, claras como al agua clara (son las palabras que están en el recuadro). Y las elegí por él, por el Dani, porque yo estaba presente aquel día en el Inescer, cuando él te adoptó y vos lo adoptaste y todos nos adoptamos para dar una nueva pelea, esta vez desde la Asamblea Popular Todos por la Justicia, como la bautizamos a partir de una de tus mociones. Yo vi a ese joven sumarse a una causa justa, porque adivinó en vos ese don precioso. Y entonces militó a tu lado, a nuestro lado, como tantos otros, y ayer escribió que sos una estrella.
Yo me permito disentir y te mociono semilla. Entiendo que no te estaremos enterrando, sino sembrando. A las 16.30 partiremos desde Villa María hacia La Playosa, para plantarte allí, al lado de tu “Tuco” García Montaño. Y vas a crecer y vas a florecer otra vez más, más que nunca.
Iremos codo a codo, como en cada marcha, con antorchas en los ojos, porque a veces aflojamos un poco. Pero vos, que sos paz, sos pan, sos más, lo vas a entender.
Acá te aparecés por los pasillos con el chaleco de El Diario, buscando info para el Rural; allá te ven con la pechera de la CTA, joven muchacha, pintando consignas por la avenida Libertad, que lo demás no importa nada... Caminás por las paredes porque la Patria se demora, aunque vamos, vamos a su encuentro, a sus brazos que calientan.
Acá mismo se está reafirmando un compromiso, allá otro tanto y más allá también. Vive en nosotros la amistad, vive en nosotros el disenso. Conviven juntito a tu ejemplo.
Ahora descansá tranquila, semillita, estrellita. Porque aquí se queda la clara, la entrañable transparencia, de tu querida presencia. Alcen las copas compañeros. La tierra está fértil.

Cualquiera de nosotros
@ Hasta la victoria...

Mi querida amiga Vilma:
Cuánto dolor siento en este momento al enterarme
de tu partida.
Es esa sensación de ahogo en la garganta tratando
de buscar una explicación.
Es el preguntarme tantas cosas...
Me consuela pensar que en el firmamento
brilla una nueva y fuerte estrella,
llena de vitalidad, que desde allí va a alumbrar
nuevos caminos para los que acá nos quedamos...
Te amo mucho, mamá Vilma (así te decíamos).
Sé que en cada lucha nos vas a estar acompañando...
Y te saludo sencillamente como
a vos te gustaría que te saludaran:
"Hasta la victoria, Cumpa"...


Escrito ayer por el joven periodista Daniel Cardozo
en su muro de Facebook.