El legislador provincial Marcelo Frossasco habló por primera vez en la mañana de ayer sobre la decisión del intendente Guillermo Cavagnero de buscar la reelección ignorando en su lista a los hombres del riñón del ex mandatario.
Al llegar a la Escuela Pablo Sexto, tras entregar subsidios a centros de jubilados, expresó su posición. “En un momento me quise ilusionar porque mucha gente me quiso ilusionar, en la calle y en instituciones que visitaba. Después de realizar consultas de tipo familiar y médico, decidí que no. Desde 2001 tengo alta presión arterial y el médico me dice que las situaciones de estrés perjudican el cuadro. No tengo el ciento por ciento de la voluntad política para gobernar una ciudad complicada. Uno siempre anhela ser intendente de la ciudad. Fue una decisión propia no candidatearme”, aseguró.
El funcionario reveló que el concejal Mauro Bizzarri y la tribuno Sandra Sgubini llevaron adelante una negociación con el Gobierno local porque “se merecía un puesto de participación la segunda autoridad” de la ciudad, en alusión al presidente del Concejo Deliberante y porque “contaban con el apoyo de un legislador provincial que los iba a acompañar en la campaña”, pero -advirtió con cierta desazón- las tratativas no llegaron a buen puerto. “El intendente no satisfizo las expectativas de los dos compañeros y ellos decidieron no integrar la lista”, aclaró.
Consultado sobre qué hará en la campaña electoral con vistas al 3 de julio, subrayó que “los que tienen que trabajar son los candidatos”, aunque aseguró que “si se nos convoca con mucho gusto lo haremos”.
“Estoy a disposición de mi partido, como lo hice toda mi vida, siempre y cuando se nos convoque como se merece un grupo, creo humildemente, importante de la ciudad”, destacó.
Ante la pregunta relacionada con las versiones que indican que personas de su grupo votarán al radical Germán Bicego, expresó que “seguramente se hacen y se harán muchas especulaciones” pero aseveró que no atentará contra las posibilidades del justicialismo de retener el Gobierno.
En varios pasajes de la entrevista, Frossasco dijo tener “la tranquilidad de haber actuado como caballeros, respetando los acuerdos” y declaró que “tal vez muchos no tengan esa tranquilidad”.
Tiró flores en varias ocasiones hacia Bizzarri (“es un compañero extraordinariamente valioso, yo no hubiera permitido de ninguna manera si estuviera en el Ejecutivo que se quede fuera de los cargos electivos”) y Sgubini y negó que haya acordado su lugar en una Subsecretaría de Estado en el próximo Gobierno provincial. “Los políticos y caballeros de bien no ponen condiciones. Si creen que puedo ser útil, bien, si no creen, bien también porque el partido ha sido extremadamente generoso conmigo, con cargos impensados para un hijo de una familia trabajadora”, resaltó.
“No he hecho siquiera una sola operación política, ya podría estar integrando la lista sábana de legisladores”, manifestó.
Cuando EL DIARIO le preguntó si esta situación hacía temblar la posibilidad de Cavagnero de alcanzar la reelección, apuntó que “por los números que tenemos pinta ser una elección tremendamente reñida, según encuestas realizadas inclusive por consultoras de Córdoba capital, pero estamos exentos de toda culpa porque no fuimos convocados ni para tomar un café”.
Sobre el final, dejó traslucir que Eduardo Accastello había planteado que no hubiera candidatos en Villa Nueva hasta tanto no se consensuara pero “después ocurrió otra cosa y los resultados están a la vista”.
D. B.