El director del IPEM 56 Abraham Juárez dio un contundente respaldo a la directora del IPEM 147 Manuel Anselmo Ocampo en medio de la controversia generada por sus declaraciones a EL DIARIO, publicadas en la edición del 25 de mayo.
Henry Calvo consideró ayer, al ser consultado por este matutino, que “lo grave no es lo que dijo” Mirta Karpow (quien conduce el establecimiento educativo de calle Catamarca) “sino lo que sucede y que además no nos hagamos cargo”.
Como se conoce, la titular del ex Comercial señaló que el consumo de alcohol y drogas en los alumnos iba en aumento y advirtió sobre la intolerancia y la exposición a riesgos que presentan muchos adolescentes.
Sus dichos originaron una toma simbólica de la escuela por parte de los jóvenes y de dos docentes, Mónica Sonzini y Derna Montero, al considerar que las expresiones de Karpow los habían dañado.

Calvo llama al debate

Al ser abordado por este medio, Calvo, directivo del secundario público situado en barrio San Martín, sugirió que esta situación debería abrir un debate “entre todos para ver de qué manera podemos salir adelante ante estos flagelos”. “Es un tema muy preocupante y muy delicado como para ser abordado por una sola institución”, resaltó.
“Sería importante generar algunas cuestiones para la discusión del tema, veo que todos opinan desde afuera, pero sabemos que la problemática citada por Karpow es real y no es sólo de esa escuela sino de la sociedad. Un colegio no es ajeno a esta problemática”, declaró.
Ante una pregunta de este matutino, el docente consideró que “está bien que Karpow lo haya expresado, no creo que haya dicho cosas que no son ciertas ni que estuvo fuera de lugar” y luego afirmó que no está de acuerdo “con el tratamiento y la magnitud que tomó el asunto”. Asimismo, dijo estar preocupado “porque pasa el tema en un día y queda en la nada, cuando debería servir para el debate” de este drama de las adicciones. “Siempre volvemos, luego, a lo cotidiano”, se lamentó.
“Este es un problema no del IPEM 147 sino de todos y la escuela puede llegar a ser el lugar del debate, el espacio para prevenir algunas cuestiones, y hablo de prevención porque pensar en erradicarlo definitivamente suena a utopía”, manifestó Calvo.
En alusión a la paralización de clases por parte de los estudiantes, el docente alertó que “por lo que he leído hubo algunas profesoras involucradas y yo creo que antes de agitar a los chicos hubiera llamado a los padres para decirles que la realidad es esta”.
Luego, Calvo recordó un episodio de la semana pasada: “Un vecino denunció por radio que había gente que vendía drogas en inmediaciones de nuestro establecimiento; en la formación les dije a los jóvenes que no los quiero más frente a la escuela sino que estén aquí dentro, a mí no me consta que les ofrezcan drogas pero hay que ir buscando soluciones”. En este sentido, consideró que “el vecino tiene que llegar a la escuela antes de ir a los medios de comunicación”.
“Los jóvenes piden a gritos que los ayudemos, ocurre que son muy impulsivos y por ahí incurren en posturas como la que han tomado”, añadió.

Trabajar en red con las demás escuelas

Henry Calvo consideró que la problemática de las drogas debe ser “abordada en red por todos los directivos” de las escuelas y contó que leyó las declaraciones de Graciela Olmos, quien conduce el Vera Peñaloza, en EL DIARIO de ayer. “Me parece que hay problemas que se pueden solucionar hacia adentro, como ella dijo, pero no en el caso de una problemática de esta magnitud”, advirtió. “No decirlo es tapar la mugre”, opinó.
“No tenemos ni los medios ni la capacidad para solucionarlo dentro de la escuela y el no exponerlo significa dilatar respuestas”, concluyó.

Clases normales con alto ausentismo

Luego del clima de crispación vivido en el IPEM Manuel Anselmo Ocampo el jueves, cuando estalló la reacción del estudiantado a raíz de las expresiones de la directora, ayer el establecimiento recuperó la calma y hubo clases de diversas asignaturas.
Pese a que por Internet, a través de las redes sociales, los adolescentes adelantaban que continuaría el reclamo de una retractación por parte de Karpow, sólo un minúsculo grupo intentó prolongar la controversia. Pese al dictado de clases, hubo un alto porcentaje de ausentismo.