Quiero hacer llegar esta carta a EL DIARIO para que a través de este medio vean mi desesperación y la falta de justicia hacia mi persona.
Soy mamá de cuatro menores de 12, 10, 6 y 3 años de edad.
Hace un año y medio que estoy separada por los malos tratos que recibía física y mentalmente.
Debido a esto existe una medida de restricción para conmigo y los cuatro menores. A pesar de esto, el día 26 de abril tuve que ir a rendir a Córdoba (y) como no tenía con quien dejar a mis hijos, los mandé con el padre para que los cuidara ese día, ya que nunca cumplió con la mantención correspondiente. Por ese día, pensé que era también su obligación.
Cuando vuelvo lo llamo para que me los mandara a mi casa y me respondió -incluso tengo los mensajes de texto- que no me los va a devolver y que si no le alcanzaba ropa, me iba a denunciar.
Al día siguiente me dirijo a Tribunales, al tercer piso, a "Violencia Familiar". Me informan que mi caso es tema de "Tenencia", (por lo que) me dirijo al segundo piso, al fiscal de turno. Me dicen que ahí no correspondía.
Me dirijo, entonces, al primer piso, a "Asesoría Letrada", donde me dan un turno. A la semana siguiente voy, pero no encontraban mi expediente, por lo que me hacen ir a la otra semana y me informan que no pueden tomar mi caso porque soy propietaria del 50% de una central de remise y que debía poner una abogada particular.
A lo que voy es ¿cómo puede ser tanta injusticia?
Yo me separé por los malos tratos y me fui con mis cuatro hijos a un departamentito sin nada. La primera noche dormimos en el suelo hasta que, a los dos días, logré que me dieran mis muebles. Estaba sin trabajo, pero asimismo luché con ayuda de mis familiares y, de a poquito, salí adelante y nunca abandoné a mis hijos.
Sin embargo, esta persona nunca dejó de molestarme, violentó mi casa, me encaraba con el auto, me insultaba verbalmente, tanto en la vía pública como a través de un handy que usamos para trabajar, y siempre con mis cuatro hijos presentes.
Yo alquilo. La mayor comenzó la escuela secundaria, los dos siguientes van a la primaria y siempre me las arreglé sola, sin la ayuda de su padre ya que éste nunca me pasó la mantención como corresponde, siendo que tiene casa propia y patrimonio con qué afrontar... encima tengo que gastar en un abogado...
Tiene sumas de denuncias, ha estado un mes preso y ahora usa a mis hijos de escudo y hace el papel de padre, siendo que en un año y medio no se preocupó.
Nadie me da una solución. A eso llamo injusticia. Una persona que tiene tantos antecedentes sigue molestando en horarios de trabajo verbalmente por un handy, donde existen móviles con pasajeros que es imposible no escuchar. ¿Usa de trofeo a mis hijos y que nadie haga nada...?
Ya no aguanto más esta situación que no tiene final. Esto me lleva a que algún día me desgracie.
Yo quiero recuperar a mis hijos porque soy una excelente madre. Siempre luché y trabajé para ellos. Ellos fueron mi motivo de separación. Yo quiero una vida digna para ellos, sin violencia, donde haya paz y tranquilidad y, sobre todo, amor.
Tal vez yo sea pobre y no les pueda brindar auto, computadora o demasiado dinero para los recreos como los “compró” el padre durante este mes, pero les brindo lo más importante: el amor de mamá. Eso nunca les va a faltar.
¡Estoy desesperada!

María Celeste Suárez
DNI 27444124