“Accastello y Olaviaga son dos b...”, soltó El Flaco Pailos en medio de la primera función brindada en nuestra ciudad, el viernes pasado. Ante un Teatro Verdi totalmente colmado, el humorista comentó en sorna sobre los afiches de campaña electoral que las fuerzas comandadas por los candidatos Eduardo Accastello y Miguel Olaviaga, colocaron por sobre los avisos callejeros que anunciaban sus propias actuaciones. Por lo visto, tales acciones no le restaron ni difusión ni localidades vendidas, ya que el viernes por la tarde debió agregar una nueva función para anoche (pautada a las 0.15). Más allá de dichos chascarrillos y algunas menciones a amigos villamarienses (como Giraudo de la firma comercial Don Emilio), Pailos brindó un espectáculo más que entretenido y dinámico, con el sello característico de su performance histriónica: una seguidilla inusitada de chistes procaces y latiguillos con los más acentuados modismos cordobeses. Esta vez, sin la compañía de su eterno partener Japo Molas (ahora residiendo en Cosquín) pero con un tecladista y un saxofonista como “secuaces” musicales y la compañía de baile Makumba, logró delinear pasajes antológicos como los diferentes tipos de borrachos (en boliche gay, en un cabaret, en un baile de cuarteto y en la Fiesta de la Cerveza). O en los doblajes de películas según regionalismos argentinos: “Batman” en correntino, “Rocky” en porteño, “Superman” en santiagueño y “Top Gun” en cordobés.
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