¿Superman es un héroe?, pregunta mi hijito más pequeño. Entonces yo lo miro hondo, tan hondo que me pierdo en sus ojos caramelo y me tomo un tiempo para contestar. Elijo las palabras para no mentir, pero tampoco me gustan las verdades a medias.
A Superman lo inventamos para no reconocer a nuestros héroes cotidianos. Es más fácil quedarnos con el personaje de una historieta que reconocer a aquellos que nos rodean y que tienen tanto de héroes.
¿Mamá por qué llorás? Porque hoy sí se murió un héroe. Un héroe de carne y hueso, que entregó su vida durante 30 años al servicio de miles de niñas y niños.
El San Nicolás está de luto. En el centro vecinal está el cuerpo sin vida de “Luis” custodiado por docenas de chicos que lo miran sin poder mirarlo. Docenas de chicos que se quedaron huérfanos del amor y la dedicación “del Luis” como le decían. Los hay de todos los barrios, de todas las alturas, de todos los tamaños.
¿Quién los va juntar ahora? ¿Quién los va a pasar a buscar en las noches sin luna, para llevarlos a la iglesia de Jujuy o a la del barrio San Martín para que escuchen la palabra de Dios?
El Luis era un héroe, lástima que nunca se lo dije. Lástima que nunca le dije cuánto lo admiraba, me quedé con esa sensación de que tenía tiempo. Lástima que el otro domingo no le acepté unos mates porque estaba apurada, seguro iba a sacar un pan casero calentito que siempre le compraba a los chicos que vendían.
El Luis era millonario, pobre de bolsillos. Siempre los tenía flacos de monedas, pero tenía un corazón tan inmenso como todo el barrio San Nicolás que tanto amaba. Jamás supe de alguien que no haya socorrido, que no haya ayudado. Vivía para los demás, para “sus chicos”.
El Luis era un “juntador de chicos”, los papás se los entregaban confiados porque sabían que él se los cuidaba con su vida, más que si fueran suyos. Recorría los barrios, de punta a punta, buscando niños, niñas y adolescentes para llevarlos a las iglesias. Treinta años recolectando chicos para acercarlos a Dios. En lugares donde quizás Dios apaga el celular a la tardecita y recién lo vuelve a encender al otro día, él entraba y los llevaba a los templos donde la línea está habilitada permanentemente.
El Luis los llevaba en bicicletas (un ejército que él había armado para trasladar a los chicos), en taxis, a pie, como se podía. Le hacía frente al frío, al viento y a quién se cruzara en su camino. Era un pastor sin iglesia, o en realidad lo era de todas.
El Luis tenía los bolsillos flacos, pero un alma tan bondadosa que irradiaba luz.
Albañil, bicicletero, tenía algo de artista y mucho de soñador. Cuando hablaba era imposible no quedarse mirándolo, no prestarle atención, porque sus palabras atrapaban, decían demasiado.
Superman es un invento hijito, los héroes son personas como Luis, que están entre nosotros pero no las vemos y recién cuando llega la muerte montada en una camioneta y les roba la vida, se nos cae la realidad encima.
¿Por qué llorás mamá... por el Luis? No hijito, “el Luis” seguro está en paz y feliz… juntando chicos en otro lugar. Lloro por sus hijos Melina y Simón, y por los cientos de chicos que quedaron huérfanos del amor del Luis. ¿Quién los va a pasar a buscar en las noches sin luna y sin estrellas?
Tal vez “el Luis” mande a alguien, mamá.
Ojalá hijito, ojalá...
En memoria de Luis Alberto Pedernera, para que el olvido no lo olvide.
Alicia Peressutti

Aclaración de Ecogas

Por la presente tenemos el agrado de dirigirnos a ustedes con relación a la nota publicada por EL DIARIO del centro del país, en su edición del 08/06/11, cuyo titular expresa: “Motociclista muerto en la 158, frente a Vista Verde”.
En dicho artículo periodístico se menciona que el rodado que embistió al motociclista fue una “pick up F-100 perteneciente a la Empresa Ecogas”.
En tal sentido, consideramos oportuno precisar que ni el vehículo ni su propietario ni su conductor pertenecen y/o tienen vínculo laboral con esta Distribuidora. Se trataría de un vehículo perteneciente a un tercero que desarrolla eventualmente tareas externas para la Compañía en condiciones de proveedor de servicios.
Sabiendo que esta información le será de utilidad para la nota en mención, aprovechamos la presente para saludarlos muy atentamente.
Juan Manuel Saieg
Jefe de Asuntos Institucionales de Ecogas