|
|
|
|
|
|
|
| De Falco, abogado de Daniela y Valeria, mamás de Angelina |
|
|
|
|
|
La pequeña nació en la mañana del martes 15 de febrero pasado, pesando tres kilos, en un parto por cesárea que se desarrolló en la Clínica San Martín de Villa María.
Valeria, una de las integrantes del matrimonio, había quedado embarazada gracias al método de fertilización asistida que habían encarado ambas en 2010. La beba se transformó en el cuarto hijo de una pareja del mismo sexo que nació en la provincia de Córdoba.
Valeria y Daniela, mamás de la niña, se casaron el 22 de octubre del año pasado en el Registro Civil de la localidad gobernada por Eduardo Accastello y celebraron el enlace con un almuerzo en el Sport Social Club, en el que el sacerdote Nicolás Alessio (separado de la Iglesia Católica por su posición a favor del matrimonio igualitario) le dio la bendición.
Cuando quisieron inscribir a Angelina, se encontraron con una situación adversa. En el Registro Civil local, por disposición del Registro de la provincia, sólo le permitían llevar el apellido de la mamá biológica y con el agregado del “padre desconocido”, cuando en realidad, es anónimo por la misma característica de método de fertilización.
“Es cierto que el Código habla de marido. Igual los formularios de las partidas de nacimientos que tienen impreso el “don” y la “doña” para indicar que allí va el nombre del padre y de la madre. Hay que entenderlo: Angelina tiene dos mamás. Es hija de dos “doñas” y en consecuencia, así debe figurar en su documento”, dijo en su momento Carlos De Falco, abogado de la pareja. “Creo que si se dice marido en una norma y no va a haber leyes especiales para los matrimonios homosexuales, hay que interpretarlo como cónyuge, que es darle el sentido del nuevo contexto”, había apuntado.
A partir de entonces se barajó la posibilidad de presentar un recurso de amparo.
Final feliz
Consultado por EL DIARIO, ayer De Falco (quien también es el presidente del bloque de concejales de Unión por Córdoba de Villa María) confirmó que el Registro Civil de la ciudad procedió a anotar a la niña con el apellido de sus dos mamás, y dejando constancia que es hija de ambas.
“El tema quedó resuelto, privilegiando el derecho fundamental, que es el de identidad”, subrayó el letrado.
Además, “más allá de ese derecho, se respetan otros colaterales como los relacionados con el divorcio, la tenencia, cuota alimentaria, los derechos sucesorios, entre otros”.
El concejal valoró que se haya evitado un proceso judicial “por el trauma que significaría para una cuestión privada y que atañe a un menor, que hay que preservar”.
“Hubiese sido tortuoso”, remarcó. Resaltó la labor de Elizabeth Bergero, jefa del Registro villamariense, quien accedió a la inscripción y “siempre estuvo a disposición”, aunque la determinación no dependía de ella sino del Registro provincial, que dio el visto bueno.
Otras notas de la seccion Locales
Olaviaga y Bedano en el racimo de opciones
Los comicios marcados por la presencia de Zannini y Cavagnero en las boletas
"Ya no es factible sostener la imagen de familia dominante"
Entusiasmo y aprendizaje: lo que dejó la Feria de Ciencias
"Cada vez más niños se involucran en la ciencia"
|