Para lograr soluciones efectivas a la situación que enfrenta el sector lácteo se deberá generar el marco político-institucional necesario, dentro de la plena vigencia de las garantías y derechos constitucionales, que haga posible la gestión del negocio lechero en un contexto de reglas de juego estables que otorguen confianza y previsibilidad a los actores de la cadena y entre éstos y el sector público. De la misma manera corresponderá restablecer el funcionamiento cabal de las instituciones, haciendo realidad la seguridad jurídica y el imperio de la ley, en el marco del respeto al principio de subsidiariedad del Estado.
Nuestras propuestas son las siguientes:

1. Retornar a un sistema de exportaciones automáticas eliminando la necesidad de los ROEL cubierta por los registros aduaneros vigentes. Desterrar cualquier tipo de cupificación de las exportaciones que contribuirían a aumentar las distorsiones actuales en la comercialización sin beneficio alguno para la cadena ni para los consumidores, que se ven afectados por estrafalarios márgenes de intermediación.
2. Evitar que regulaciones internas agraven los efectos de la característica volatilidad de los mercados internacionales, implementando en sentido contrario soluciones que los atenúen reforzando así la capacidad del productor para enfrentar los riesgos propios de su actividad.
3. Comenzar con el trabajo aprobado en el año 2007 “Estudio de la Comercialización en el Sector Lácteo”, como herramienta apta para identificar las distorsiones que amplifican la distribución irregular dentro de la cadena sectorial.
4. Eliminar las intervenciones distorsivas en la actividad láctea, actuales o potenciales, asegurando la competencia a todo lo largo de la cadena, desterrando acuerdos que atenten contra ella y que la mala regulación fomenta.
5. Devolución de impuestos indirectos a través de reintegros a la exportación.
6. Facilitar la prefinanciación de exportaciones
7. Liberar la exigencia de un stock mínimo totalmente innecesario desde el momento que no hay limitantes, ni nunca las hubo, al abastecimiento interno.
8. Facilidades para el aumento del capital de trabajo y el financiamiento de stocks.
9. Compromiso activo del Gobierno nacional en las negociaciones con el lobby lácteo brasileño, procurando que se garantice un comercio fluido de lácteos en el ámbito del Mercosur.
10. En el orden fiscal estudiar la conveniencia de reducir el IVA, Ingresos Brutos, impuestos municipales y compensar otras obligaciones con el Impuesto a los Débitos y Créditos Bancarios en su totalidad. Autorizar desgravar de Ganancias los gastos en: mano de obra, fertilizantes, equipamiento, etcétera.
11. Optimización del sistema de compras por parte del Estado nacional, en productos alternativos como la leche larga vida en los que hay capacidad ociosa.
12. Relevamiento de la capacidad instalada en las industrias para elaborar productos con destino a la exportación.
13. Devolución automática del IVA exportaciones contra presentación de los documentos de embarque.
14. Alianzas estratégicas entre industrias, y entre estas y productores para concretar negocios de exportación.
15. Promoción del consumo de productos lácteos por medio de campañas publicitarias.
16. Acuerdos bilaterales con países que tienen altos derechos de importación.
17. Promover inversiones que permitan procesar y comercializar el actual y los futuros crecimientos en la producción de leche.
18. Coordinación privada de la producción primaria para direccionar hacia la exportación lo que el mercado interno no necesita.
19. Concretar la coordinación entre la producción primaria y aquellas industrias que no estén en condiciones de manejar grandes fluctuaciones en la oferta o excedentes de importancia.
20. Información actualizada sobre la producción y sus destinos, y sobre las exportaciones (mix exportador, destinos, volúmenes y precios).
21. Información y análisis de los mercados internacionales.
22. Fortalecer los mecanismos de asistencia directa que aseguren el consumo a los sectores más desprotegidos de la población, sin que ello signifique una carga adicional, que el sector no puede ni debe asumir, máxime cuando las regulaciones significan subsidios a las clases de mayores ingresos.
23. Eliminar las limitaciones a la importación de insumos para la producción.