“Está Moreno en Villa María”. Esa noticia fue circulando ayer en mensajes de texto que lograron romper el estricto operativo en el que se llevó adelante para mantener en secreto la visita del polémico secretario de Comercio Interior de la Nación, Guillermo Moreno, a nuestra ciudad.
El funcionario llegó acompañado del director de Lechería de la Nación, Luciano Di Tella; la diputada nacional Nora Bedano; el intendente de Villa María, Eduardo Accastello y un hombre que venía de la producción y hoy está cercano al Gobierno nacional, Jorge Videla.
Hubo amagues para desorientar sobre el lugar de la reunión. Primero que podía ser en Aerca, luego en el Eninder y finalmente, donde se realizó el acercamiento entre funcionarios e industriales: la sala de reunión del Howard Johnson.
Allí, Nora Bedano esperaba en el hall del primer piso y cuando se acercó EL DIARIO, negó que Moreno estuviera en el lugar. Pero luego, todo se supo y periodistas y un puñado de productores comenzaron a llegar al lugar.

@Promesas

Los dirigentes de Apymel y los industriales sintetizaron las promesas que trajo Moreno.
En primer lugar, se comprometió a disponer toda la estructura de Cancillería para lograr vender los quesos que se amontonan en las cámaras de las fábricas.
Además, aseguró que va a hablar con hipermercados y supermercados para que aumenten el nivel de adquisición de lácteos.
En tercer lugar, indicó que el Estado nacional adelantará las compras de los productos para planes sociales.
Todas estas medidas son para aliviar el sobre-stock al que están sometidas las industrias porque no tienen mercado interno ni externo. Y además, los precios están caídos a tal nivel que no sostienen los costos.
Esto lo planteó en las 18 entrevistas individuales que tuvo en el hotel, más en la que desarrolló con miembros de Apymel (Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas Lácteas) y las dos cooperativas lecheras de la zona: Arroyo Cabral y James Craik.
Trascendió que Moreno justificó el apoyo a las grandes industrias indicando que “tenemos una que anda mal (La Serenísima) y una hermana boba a la que le conseguimos un novio venezolando (SanCor)”.

@Industriales, satisfechos

Los industriales que al salir del hotel hablaron con la prensa (fueron la minoría) aseguraron que estaban “optimistas” por el futuro del sector tras la reunión a puertas cerradas.
Ratifican que con el mercado y precios actuales, es difícil, sino imposible, pagar un peso por litro. “Vamos a tratar de razonar con los productores y consensuar”, dijo Javier Baudino, de Apymel. “Eso no quiere decir que nos den el visto bueno para no pagar lo que dice el acuerdo”, aclaró.
Al término del encuentro, Luciano Di Tella y Accastello dieron explicaciones a la prensa indicando que la reunión había sido positiva.
“A cuatro meses del conflicto, hoy podemos decir que avanzamos. Que los productores de la cuenca de Villa María van a estar representados en la mesa de debate y que estamos buscando soluciones”, dijo Accastello.
Di Tella, por su parte, expresó que es difícil estimar hoy el costo de la producción y por eso relativizó la crítica por el peso por litro.
Aseguró que esperan abrir la exportación hoy limitada “por la crisis internacional” y finalizó diciendo que en dos meses, “estará la respuesta en lo que hace a apertura de mercados”.
Cuando los funcionarios se retiraron de la cochera, fueron escrachados e insultados en el aeropuerto, al momento de acompañar a Moreno hasta el último minuto de su estadía en Villa María (ver página 6).