"Es muy emocionante apreciar cuando los papás entran en el mundo de sus hijos. Es un instante de magia pura que no se puede explicar con palabras", se excusa a EL DIARIO, la maestra jardinera y artista infantil Adriana Szusterman, que esta tarde a las 16 brindará una función especial en el Teatro Verdi (Hipólito Yrigoyen 329).
La misma muchacha que once años atrás comenzara tímidamente con sus espectáculos en el Paseo La Plaza de Buenos Aires, es actualmente una de las referentes más importantes del movimiento de música para niños en Argentina.
Un día antes de actuar en el Orfeo Superdomo de Córdoba, la compositora y cantante montará en nuestra ciudad su nueva propuesta integral denominada "Fiesta de disfraces", que ha sido vista por nada menos que 80 mil asistentes. Vale decir que, desde el vamos, la puesta cuenta con una complicidad tácita por parte del menudo espectador que podrá asistir con el atuendo más colorido o desopilante que desee.
"Me gusta que el niño saboree el show ya desde la casa cuando piensa qué se puede poner para ir", acota Adriana. Consultada sobre el contenido del espectáculo, destacó los mejores pasajes como el baile final "bien alegre" y un homenaje especial dedicado a María Elena Walsh, en la modalidad de teatro negro.
Además adelantó que, a fuerza del lema que reza "familia unita", su papá Saúl actuará en el teclado y su hija Juli interpretará el tema "Cuando mami era chiquita", donde se suelda el lazo generacional con los papás y adultos presentes.
En plan interactivo, Adriana -que se preparara artísticamente con Ricky Pashkus y Héctor Presa- jugará con sus personajes (como Simón, el Oso Dormilón, Chancho Cholito y su reconocido Sapo Pepe) y el mensaje de las canciones como el clásico "Al agua pato", de Hugo Midón, esperando las réplicas de los más pequeñitos sobre "por qué hay que bañarse".
"Es una transmisión de valores y aprendizajes. Cuando daba clases en el jardín me parecía que se podía enseñar en forma divertida, cantando y bailando, no sólo con las típicas moralejas. Respecto a la música para niños, creía que en ese entonces estaba quedada en el tiempo. Que había que explorar más y por qué no ingresar ritmos y estilos de música como Los Beatles. No porque sean chicos tienen que escuchar cosas básicas", reflexionó.

Firmas para niños con autismo

A la par de sus espectáculos, los cuales han sido declarados de Interés Cultural por la Cámara de Diputados de la Nación y recientemente como mejor representante de la educación a través de la música en Rosario, la artista se interesa en causas nobles como la atención a niños con autismo. "Ha sucedido que papás me cuentan que sus hijos han empezado a hablar gracias a mis canciones. Por eso, en mis shows muchos padres juntan firmas para que se amplíe la cobertura de la actual Ley de Discapacidad", apunta sobre los pequeños aportes en su "misión en la vida".
Consultada sobre las propuestas para niños en la actualidad, señala que se destacan buenas opciones "hechas con calidad y respeto" y otras que emergen del oportunismo. "En vacaciones de invierno hay mucha caradurez", añade.
Respecto al canal público "Paka Paka", indicó: "Me puso muy contenta su aparición, sobre todo porque se nota que tiene un buen apoyo pedagógico detrás. Me encantaría poder participar de ese proyecto".
Adriana, quien remarca que nunca ha contado con las espaldas de un canal televisivo o una discográfica, a veces no puede comprender el tamaño de su éxito. "Actualmente me llegan cartas desde Siria, México, España, Israel, Colombia y Australia. Es increíble que todo haya surgido de un boca a boca", señala. Entradas a $40, $60, $80 y $100.