La decisión de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner de prohibir la publicación de avisos clasificados de oferta sexual en todos los diarios del país, en el marco de la lucha contra la trata y la esclavitud de personas, generó gran controversia. Un sector de la sociedad aplaudió la medida, otro la cuestionó por vulnerar la libertad de las personas de ejercer la actividad sexual. EL DIARIO buscó ayer la opinión de vecinos, quienes se expresaron en este sentido:
• Mauricio, 34 años, taxista y organizador de eventos: “No estoy muy involucrado en el tema, pero hay que mirarlo desde dos lados”
“Por un lado, hay que verlo desde la mirada de la gente que se dedica a esto. Leí en EL DIARIO la nota (a Vanesa Cufré, referente trans) que decía que muchas familias mantienen sus hogares con esto. Por otra parte, hay que combatir la trata. Más allá de la prohibición, siempre le buscan vuelta para continuar, es como la droga, cierran una puerta, pero abren otras. Quizás el método no es abolir sino insertarlas en la sociedad, darles un trabajo”. “No, para mí no es un trabajo digno, empleo en la Argentina hay, si uno le busca la vuelta. Está a quien le gusta la plata fácil, de arriba, y otros que ponen el lomo trabajando veinte horas. No es agradable para una mujer el prostituirse, yo no lo entiendo”.
• Jorge Signoretti, 49, panadero. “Está bien que se haya prohibido, porque quienes ofertaban no tienen control sanitario y así están al alcance de cualquier persona porque el diario es muy accesible. Tal vez un chico que no conoce de los riesgos a los que se expone, se acuesta con una mujer sin control. Considero que se deberían organizar mejor, si estuviera controlado sanitariamente sí podría existir el rubro de avisos. No sé que decir sobre el trabajo en sí, yo creo que es la profesión más vieja del mundo”.
• Gustavo, 36, chofer. “Por un lado me parece bueno pero por otro creo que lesiona la libertad de expresión, estamos en democracia y creo que no debiera ser así”.
“Habría que ver si es un trabajo digno, aunque soy partidario de que cada uno es dueño de hacer lo que quiere”.
• Mariana, 27, estudiante. “Apoyo la medida presidencial porque los avisos promueven la esclavitud. Para mí, no es un trabajo, considero que las personas pueden hacer otro tipo de cosas para tener dinero”.
• Inés, 42, empleada administrativa. “Como mamá de dos nenas me parece muy bien que se hayan prohibido, es una manera de evitar que adolescentes que en su afán de un mejor pasar económico y en la ambición recurren a estos avisos y sin querer caen en la prostitución y la trata, que son flagelos”.
“No creo que sea discriminatoria la prohibición. Pienso que cada uno tiene derecho a ganarse la plata como quiera pero no de esta manera, es algo sin regreso y no es un trabajo independiente porque siempre está el proxeneta detrás”.
• Vanesa, 31, ama de casa. “Desconocía la decisión. Estoy en contra de la trata, recién ahora sé de qué se trata porque se habla mucho. Creo que con la prohibición se empieza a tapar un poco la cuestión. Con los avisos, tenemos datos frente nuestro para ver si es o no trata”.
“No es un trabajo digno, algunos dicen que lo hacen porque no les queda otra opción pero creo que hay muchas alternativas. El de la prostitución es el camino más fácil”.
• Alvaro, 30, bromatólogo. “No, para mí la prostitución no es un trabajo, no estoy de acuerdo para nada con la actividad”.

Epígrafes: Mauricio - Jorge - Gustavo - Mariana - Inés - Vanesa y Alvaro