Los chinos no dudan de los parámetros de calidad de la industria láctea argentina. De hecho, ya hay empresas importantes que están exportando especialmente leche en polvo y suero a ese país, aunque ninguna es de la cuenca lechera de Villa María.
Y a pesar de que los orientales producen también lácteos, no llegan a satisfacer ni mínimamente el consumo interno en crecimiento de los más de 1.300 millones de habitantes.
Esos datos de la realidad hicieron que desde Apymel, Javier Baudino, rescatara la importancia del convenio firmado ayer con Gu-Jicheng, líder de la China Darly Association (CDA), para empezar a abrir puertas comerciales entre ambos países.
“Hoy la industria se encuentra con un problema: el aumento de la producción hace que las Pymes malvendan a los supermercado porque no es un producto que se pueda guardar. Estamos vendiendo a pérdida. Si lográramos comenzar a comercializar con China, no volvería a ser un problema el excedente de la producción”, dijo Baudino, quien es titular de Apymel Córdoba.
El acuerdo fue rubricado ayer por el representante chino de la industria lechera y Pablo Villano, presidente de Apymel a nivel nacional.
Hubo también otro acuerdo de cooperación entre la CDA, en este caso, con la Junta Intercooperativa de Productores de Leche de Argentina, representada por el craikense Dany Lorenzatti.
En diálogo con la prensa, Gu-Jicheng señaló que llevan tres días recorriendo industrias lácteas y como evaluación considera que hay “una buena oportunidad para el desarrollo entre ambos países”.
Destacó que hay similitudes y diferencias entre la producción y la industria de China y Argentina.
“Nosotros tenemos razas similares de ganado lechero”, remarcó, al hablar de las semejanzas entre una y otra producción. “Sin embargo, en Argentina hay más materia prima para el pastoreo, algo que nosotros no tenemos”. En lo que hace a la industria, remarcó que en nuestro país está más diversificada.
Actualmente, China compra a nuestro país 750 mil toneladas de lácteos, de las cuales, 400 mil toneladas son de leche en polvo. El resto se integra con suero y quesos.
“Nos interesan fundamentalmente ampliar en lo que hace a leche fluida y quesos”, aseguró Gu-Jicheng.
Igual, si bien consideró con optimismo el encuentro binacional, entiende que todavía no se han avanzado en detalles “como precios, calidad y condiciones”.
Aseguró que cada chino consume 28 litros de leche anuales y que hay una expansión de la economía que permite una mejora en la calidad de vida de los habitantes del país más numeroso del planeta, lo que amplía las posibilidades de oferta a ese país.
En el acto de firma del convenio hubo representantes de diferentes organizaciones vinculadas a la lechería y contaron con el acompañamiento de Roberto Sossin, quien es director en la Subsecretaría de Lechería.
Sossin destacó que el ministro de Agricultura, Julián Domínguez y el subsecretario del área, Jorge Videla -quien actualmente está en China- fueron “los que abrieron las puertas para la comercialización de nuestros productos al gigante asiático”.
En síntesis, aunque no hubo concreciones de negocios, hubo un denominador común de optimismo para pensar en la venta de productos lácteos a los chinos, que evaluaron como muy positiva la calidad de la producción y la industria nacional.