Escribe: Juan Manuel Gorno

Un equipo de jóvenes y algunos no tanto, un técnico de overol y un grupo de trabajo de profesores serios, que se aferraron a un proyecto ambicioso, aportaron ayer la nota más relevante de los últimos años en el fútbol local: la Universidad Nacional de Villa María, en su debut dentro de un campeonato oficial de liga, se alzó con el título de campeón y no sólo desató una fiesta merecida en Plaza Ocampo; también marcó un hecho inédito, por ser el primer equipo no dependiente de un club que se asegura semejante conquista.
Aquel sueño por empezar a jugar a nivel oficial que gestó Joselito Bernadó y compañía, se pudo materializar en la liga durante esta temporada. Y el “examen” final no pudo ser mejor: El equipo académico aprobó con goleada (3 a 0) sobre un rival de jerarquía, Deportivo Argentino, y los primeros hinchas de esta nueva propuesta se regocijaron por ser testigos directos de algo que puede marcar un antes y un después en la vida institucional de la casa de altos estudios.
De todas maneras, para convertir esa osadía en el impulso deportivo que le hacía falta a la UNVM, hubo que transformar a sus jugadores en los privilegiados del momento histórico. Y fueron ellos (como se debe resaltar siempre en el fútbol) los que ayer le pusieron el alma y algo más a la segunda final del Apertura, llevando a cabo el plan de Joselito y aprovechando los errores de un rival desconocido, que lejos estuvo de refrendar sus pergaminos, más allá que haber llegado a la final sostiene el nombre de Argentino en la cúspide de la competencia doméstica.

Viento y goles

Las ráfagas de viento que surcaban la “Placita” prometieron hacer un partido tan ordinario como el primero de esta serie final, pero la “U” no perdió su potencial y se hizo fuerte en los arcos, ahí donde se cambia la vida de un duelo futbolero.
Arriba, el goleador de la tarde, Matías Barbuio, siempre fue la pieza de peligro constante, aunque Rodrigo Liendo también tuvo su momento feliz. Y en la portería propia, la “U” sacó diferencias con Rafael Ballatore, hombre de oficio y de grandes reflejos, clave para sostener el arco en cero cuando Argentino arremetió con todo.
No obstante, debió bregar bastante el equipo de Bernadó, siendo inteligente para “trabajar” el encuentro tácticamente, primero con pases largos para la movilidad de sus delanteros frente a la línea defensiva de tres hombres que puso Argentino. Y luego, cuando el gol estuvo asegurado, poniendo el sacrificio y el orden para cerrar espacios atrás.
Con el viento a su favor en los primeros 45 minutos, UNVM quiso protagonismo y buscó además con la sociedad Martín Truglio-Gustavo Reyes por la derecha, mientras Argentino no encontraba precisión y retrocedía mal.
El arquero Roberto Bazzani, tras un tiro libre del propio Truglio, salvó en principio la primera caída de su valla, mientras Argentino no despertaba.
Claudio Andrada -siempre decisivo en el juego del equipo de Christian Romero- ayer anduvo errático; bajó demasiado para pedir la pelota, pero nunca congenió con el resto de los volantes, que tampoco le daban profundidad a su equipo.
El corazón del pibe Ramiro Cortez, que llegó hasta el fondo y luego le regaló la pelota a Ballatore, fue tal vez lo más rescatable del “Lobo” antes de la 20 minutos de juego.
Mientras, Universidad hizo daño con Barbuio en el área. Y a los 25’, el ex Alumni sacudió la modorra cuando recibió un centro de Reyes y, de media vuelta, la clavó contra un palo para desatar la fiesta académica en la “Placita”.
El propio Barbuio estuvo a punto de aumentar rápido, pero cuando quedó mano a mano con el arquero, tras un pelotazo largo, le metió el frentazo para enviarla de emboquillada y el palo devolvió el remate, de manera increíble.

De contra

Argentino, que apenas había avisado con un cabezazo desviado de Julio Gastaldi, quiso cambiar su imagen en el complemento, cuando entró Nicolás Morello y salió Almada.
Universidad, mientras, siempre intentó cortar los circuitos del rival presionando sobre su cerebro, Gabriel Gonella, a la vez que fue achicando espacios hacia atrás desde el inicio mismo de la mencionada etapa, atendiendo la influencia del viento.
Puesto de contragolpe, la “U” no lastimó antes porque Barbuio volvió a perder otra chance clara (eludió al arquero y la tiró afuera), a los 3 minutos. Entonces debió rezarle a Ballatore, quien se lució perfectamente con un par de intervenciones bajo los tres palos, ante disparos de Germán Danna. Encima, cuando “Rafa” se equivocó en una salida, el propio Danna cabeceó desviado.
A medida que las agujas del reloj corrían, Argentino se fue desesperando cada vez más, chocó con la máquina de robar pelotas llamada Rodrigo Aguirre, se perdió en las decisiones del árbitro José Martínez (que cobró todo, hasta lo que no era), y se desordenó atrás.
Tanto fue el desconcierto del “Lobo” que Carlos Jacobi le regaló el balón a Barbuio en el segundo gol, antes que el delantero definiera cruzado, al palo más lejano de Bazzani.
Después Martínez echó a Salvai y Andrada (tras una trifulca) y, diez minutos más tarde, Pierantoni salvó sobre la línea lo que pudo ser el descuento del conjunto de Romero.
Al final, Liendo le puso la frutilla al postre, con una definición que reflejó su categoría, mientras quedaba desparramado un desprotegido Bazzani.
En la tribuna de cemento, los nuevos fans de la “U” supieron que sólo había que soltar los cánticos de campeón. Una nueva dinastía villamariense comenzaba a desandar el camino de alegrías.

La “U” logró además otra marca inédita en la Liga Villamariense, ya que por primera vez salió campeón un equipo que no depende de un club.

En la segunda final, el equipo “académico” fue más práctico frente a los arcos. Adelante se las arregló con la peligrosidad de Barbuio y Liendo. Y atrás Ballatore estuvo fantástico en un par de intervenciones.

El sueño que tuvo Joselito Bernadó y compañía se
materializó de la mejor manera. Quizás esto sirva para redoblar la apuesta desde la casa de altos estudios, que siempre le dio relevancia al deporte

UNVM 3
Ballatore 7
Pierantoni 6
Salvai 5
N. Rodríguez 5
Romero 6
Reyes 6
Aguirre 6
Hernández 5
Truglio 6
Liendo 6
Barbuio 8
DT: Joselito Bernadó

Argentino 0
Bazzani 5
Braun 4
Jacobi 4
Ga. Danna 4
Ge. Danna 6
Gonella 5
Pacifici 5
Almada 5
Andrada 4
Cortez 4
Gastaldi 4
DT: Christian Romero
Goles: 25’ PT Barbuio (U), 28’ ST Barbuio (U) y 43’ ST Liendo (U).
Cambios: inicio ST: Morello (5) x Almada (A), 34’ ST Villagra x Hernández (U) y Turina x Braun (A); 45’ ST Vicario x Aguirre y Ostiatti x Liendo (U).
Amonestados: Turina (A);
Aguirre y Liendo (U).
Expulsados: 32’ ST Salvai (U) y Andrada (A); 47’ ST Cortez (A).
Jugado en: Plaza Ocampo.
Arbitro: José Martínez (LVF).
Público: 2.000 personas, aproximadamente.