La inminente partida del atacante Román Strada a Talleres de Córdoba desató ayer un verdadero vendaval en Alumni, que tanto los dirigentes como la nueva subcomisión de fútbol intentaban frenar anoche, en medio de la queja generalizada de los hinchas.
La polémica surgió porque el pasado martes por la noche, la nueva subcomisión de fútbol había acordado la continuidad del ex Matienzo, pero ayer por la mañana, es decir, en menos de 24 horas, el presidente Guillermo Morelatto y el dirigente Adrián López acordaron de palabra el préstamo del jugador con el presidente del Fondo de Inversión de Talleres, Rodrigo Escribano.
Rápidamente, Strada viajó a Córdoba y allí todos lo anunciaron como el nuevo refuerzo de la “T”, según lo que más tarde reconoció el propio Escribano, en diálogo con el programa “Tiempo de Deportes”, que se emite por FM Sport.
“Estuvimos reunidos con Morelatto, López y el jugador, hemos acordado de palabra el préstamo y ahora esperamos terminar la operación”, contó el directivo albiazul.
Antes de esto, tamaña sorpresa se llevó el presidente de la subcomisión de fútbol, Martín Barros, al enterarse por una radio de Córdoba que el jugador cambiaba de bando.
Barros se comunicó telefónicamente con Morelatto y ambos mantuvieron una fuerte discusión que reflejó la desorganización que reina hoy en Alumni.
Morelatto había anunciado la semana pasada que, en principio, no había convencido la oferta de Talleres por Strada, pero en las últimas horas, el club cordobés mejoró la propuesta y el presidente no dudó en dar el visto bueno para desprenderse del jugador y, de paso, reunir unos pesos que sirvan para paliar algo de las deudas que hoy tiene el club.
Después del malestar que despertó la operación en la ciudad, pasadas las 20, Morelatto y Barros intentaron calmar las aguas y salieron a hablar por el programa radial “El Show Deportivo”, de FM La Show.
“Todavía no concretamos nada”, dijo Morelatto, quien luego cargó las tintas sobre Strada, al afirmar que “el jugador tenía intenciones de irse y no le podemos cerrar las puertas, así como hicimos con otros jugadores”.
Barros, en tanto, dijo que se había molestado porque los dirigentes no le avisaron de la reunión, pero luego pidió disculpas y anunció que se iba a comunicar con Strada. “El me dijo que se quería quedar, así que ahora quiero saber por qué decidió irse”, afirmó.
El caso es que Morelatto, junto a López, acordaron con Escribano un préstamo hasta el año que viene, del cual no se dieron a conocer las cifras exactas (13 mil dólares según versiones), aunque el titular de Talleres reconoció que la opción de compra es de 250 mil dólares.
Hoy Strada deberá asistir a la revisión médica, en Talleres, para luego quedar a disposición del plantel que conduce José María Bianco.
Barros, mientras, no se cansa de afirmar que Carlos “Chiquito” Bossio y Facundo Diz están cerca de incorporarse al plantel como nuevos refuerzos importantes. No obstante, ayer también dijo esperar que Luciano De Bruno levante la inhibición que pesa sobre el club, por el cual Alumni no puede contratar jugadores.