En un gesto que permite entrever las buenas relaciones por las que atraviesan la Unión Industrial Argentina (UIA) y el Gobierno nacional, la entidad que nuclea a la patronal empresarial decidió festejar el “Día de la Industria” en la megamuestra Tecnópolis.
Los industriales, haciendo pie en el evento que se ha transformado en uno de los emblemas de las políticas oficiales y un centro de atracción masiva, compartieron anoche mesa no sólo con sus pares, sino también con funcionarios nacionales de altísimo rango y hasta con la cúpula de la CGT, liderada por Hugo Moyano.
Días atrás y tras el acuerdo salarial logrado por empresarios y sindicalistas, la presidenta Cristina Fernández se encargó de confirmar presencias al simbólico convite promovido desde la UIA.
La presidenta manifestó en el encuentro que “éste es un triunfo de los argentinos, de la marca nacional, de las ideas que permitieron Tecnópolis”; indicó que “el país ha sido una película apasionante y trágica”, pero enfatizó que “la película debe seguir incorporando fotogramas y actores”.
“En eso está el futuro de todos. Es el sello distintivo de los años que vienen. La Argentina tiene que vincular a todos los sectores productivos”, subrayó.
“Esta será una ocasión en la que se refuerza la identidad industrial y la importancia de nuestra actividad productiva, central para el desarrollo de la Argentina”, manifestaron los referentes del sector e ideólogos de la actividad que también previó una “visita exclusiva” para los empresarios industriales, recorriendo áreas específicas del predio que se yergue en Villa Martelli.

Tendiendo puentes

No sólo a través de eventos, la UIA demuestra su intención de sintonizar con la gestión liderada por Cristina. El titular de la UIA, Ignacio De Mendiguren, también hace su aporte en la construcción de puentes con el Gobierno de turno.
De Mendiguren, en el Congreso Anual de la Asociación de Economía para el Desarrollo de la Argentina “Consolidación del modelo productivo propuestas para la nueva década”, indicó que la entidad busca “unir a todo el campo nacional, trabajadores, empresarios nacionales y universidad”, al tiempo que reclamó evitar las confrontaciones para buscar “la síntesis”.
El líder industrial también sostuvo que “la etapa que viene es transformar el crecimiento en desarrollo, que no es un objeto que se regala, hay que conquistarlo y se afectan intereses económicos porque la lucha es por dónde se agrega el valor”.
El dirigente fabril, que también hizo uso de la palabra en la cena llevada a cabo en Tecnópolis, subrayó que “el desarrollo es un proyecto a largo plazo, no es espontáneo ni tampoco gratuito y siempre habrá resistencia porque afecta intereses internos y externos”.