El triatleta villamariense Natalio Puebla participará el 18 de setiembre en Cancún (México) del Iron Man 70,3, prueba conocida comúnmente como Medio Iron Man, que será clasificatorio para el Mundial que se disputará próximamente en Las Vegas.
El joven atleta local viene cumpliendo con buenas actuaciones en las distintas pruebas combinadas pero esta será su primera experiencia en un Medio Iron Man donde deberá recorrer 1,9 kilómetros de natación, 90 km de ciclismo y 21 km de pedestrismo (21,095 km para ser exactos).
Natalio nació en Villa María, el 28 de noviembre de 1989 y poco a poco fue metiéndose de lleno en las disciplinas combinadas hasta llegar a esta importante chance de participar de una competencia clasificatoria para el Mundial
“El triatlón, si uno pretende hacerlo en un nivel de bueno para arriba puede considerarse un deporte caro”, cuenta Natalio en diálogo con EL DIARIO y luego destaca: “Entreno seis horas todos los días, incluidos los sábados. Esto es entre gimnasio, pileta, combinándolo con las otras disciplinas. Son entrenamientos largos. Si arranco a las seis de la mañana termino sobre las doce del mediodía o si empiezo a las 11 termino a las 17 horas”.
La exigencia del entrenamiento no le quita ganas para hacer otras actividades: “Estoy estudiando para visitador médico. Me falta poco, si Dios quiere me recibo pronto”, cuenta.
Al viaje al Iron Man 70,3 de Cancún lo acompañará su padre Mario Puebla, otro de los atletas locales que comenzó practicando pruebas de calle y lentamente fue incorporándose al duatlón y al triatlón.
“Ya tenemos todo preparado, pasajes, estadía, la inscripción, el trabajo previo. Como sucede habitualmente uno mismo termina siendo su propio ‘sponsor’. Hicimos algunos trámites para tener ayuda oficial y por suerte la Municipalidad nos dio una buena mano, que nos ayudará a solventar parte de los gastos de esta participación”, nos dice Mario.
Natalio cuenta más delante de la charla que: “Voy a viajar el próximo martes. La idea es llegar algunos días antes para estar aclimatado”.
Al mismo tiempo destaca que “He gestionado becas, pero todavía no he recibido nada de la provincia, tampoco a nivel nacional. Por suerte ahora me han dado una ayuda a través de Marcos Bovo, de la Municipalidad”.
A lo largo de su corta pero fructífera carrera, Natalio ha sido campeón argentino de Duatlón en 2008 (La Pampa) y subcampeón en 2009 en Mendoza (Potrerillos), ambas en distancias short; también fue subcampeón argentino en distancia olímpica en 2009 y ese mismo año campeón cordobés de triatlón. El año pasado, su resultado más importante fue el segundo puesto en la general del Triatlón de la Vendimia, donde largaron 200 competidores.
“Este año corrí la última fecha del cordobés y fui cuarto, pero hubo un error de los controles y me hicieron dar una vuelta más en bicicleta y ahí me retrasé. Fue cuando volví a arrancar regresando de una lesión. También fui a los 21km de Rosario, donde terminé en el cuarto puesto”, cuenta el villamariense.
“Me siento bien en las tres disciplinas. Pero más cómodo en pedestrismo. A la natación la entreno en la Escuela Villamariense. Mi entrenador es Luis Garimaldi. Mejoré muchísimo con él. En bicicleta y en atletismo entreno con Leonardo Fedelli. Son dos muy buenos entrenadores. Igual cuando hago atletismo, está siempre controlándome Antonio “Vasco” Hubelli y corrigiéndome la parte técnica o tomándome los tiempos”.
“Voy a tratar de hacer todo lo posible para traerme la clasificación. No me quiero meter presión a mí mismo. Los dos primeros puestos de cada categoría clasifican al mundial. Va a estar lindo. He visto la lista de preinscriptos y hay 38 inscriptos pero no tengo referencias de los tiempos que hacen mis rivales. Yo pretendo bajar las 4 horas y media”, contó el atleta local.
“Llevar una buena alimentación, una suplementación de vitaminas, la pileta, el entrenamiento, las pesas en el gimnasio ATP, donde voy dos o tres veces por semana, todo suma para llegar lo mejor posible preparado. Hace bastante que venimos preparando la prueba, buscando datos sobre la temperatura en ese lugar, y otros detalles para competir aclimatado. No es una excusa, pero uno pretende rendir al 100 %, pero las lesiones que tuve me complicaron una preparación óptima. Me vieron los kinesiólogos de varios clubes importantes y fueron de gran ayuda”.