La escritora y lectora de nuestro medio, Aída Gómez, ha acercado el siguiente poema que homenajea a los maestros que han festejado su día el domingo pasado, en todo el territorio nacional.

Enséñame a escribir
maestro, enséñame a vivir.
Maestro, enséñame a leer
y también a convivir.
Maestro es mi palabra sabia
si tú la corriges.
Maestro, enséñame las letras
que juntas signifiquen dignidad.
Maestro, te pido me muestres
valores que sólo tú puedes dar
no me abandones con indiferencia,
yo te necesito, porque enseñas
y en casa, casi no, todos gritan
están muy apurados ¡tú no!
Ayúdame maestro, a ser cada día
una persona que valora la vida,
y no margina la diferencia.
Maestro te necesito, ayúdame
por favor a crecer con sabiduría,
te pregunto ¿enseñas qué es el amor?
No me abandones, no me dejes
perder, en esta enseñanza de persona, yo necesito ganar,
por eso yo necesito de un maestro...