Nuevamente Villa Nueva se ve aquejada por el paro de actividades en que incurren los trabajadores municipales, quienes otra vez sufren la falta de pago de sus haberes.
Llamativamente, tras las elecciones municipales vuelven a aparecer los problemas en el cumplimiento del pago de sueldos. El Gobierno buscaba desesperadamente destrabar el conflicto intentando conseguir los fondos necesarios para enfrentar el tema.
“Siendo ya el día 13, no hemos cobrado el sueldo de agosto”, dijo ayer a EL DIARIO, Daniel Sosa, el secretario General del Sitramun (Sindicato de Trabajadores Municipales). El dirigente recordó que el plazo se prorrogó por un pedido del intendente: abonar en lugar del quinto día hábil del mes, el décimo día corrido.
“Está visto que el municipio no llegó a juntar la plata. Ayer (por el lunes) depositaron 1.200 pesos en cada cuenta y hoy (por ayer) propusieron depositar mil pesos y otorgar un cheque diferido para el viernes en caso de los contratados, y para el miércoles que viene en el caso de los trabajadores de planta”, explicó Sosa tras la asamblea en que la proposición fue rechazada.
Esta circunstancia llevó al dirigente sindical a entablar comunicación con el legislador Marcelo Frossasco “para que gestione una audiencia en el Gobierno de la provincia a fin de ver si se puede adelantar la cuota de la coparticipación”, en pos de destrabar el problema.
“Nosotros agotamos todas las posibilidades que están a nuestro alcance. Nadie desconoce que es responsabilidad del Ejecutivo pagar en tiempo y forma. Uno observa una Villa Nueva con progreso por un lado, pero por otro lado no se soluciona el tema económico, que viene arrastrándose desde hace muchos años”, declaró en su charla con este matutino.
Sosa señaló que “por ahora” la medida de fuerza es pacífica, “sin cortes de calle ni de puente”, pero advirtió que “existe un descontento generalizado”, resaltando que “los compañeros nos dicen que recibir el sueldo fuera de término hace que luego haya que pagar las cuentas de cada uno con recargos”.
También, apuntó que “no puede ser que un Ejecutivo que está en sintonía con Córdoba y con la Nación, continúe sin solución”.
“No está el espaldarazo político para que la ciudad salga adelante. Este debe ser el único municipio que no puede hacer frente a los salarios de los trabajadores. Tenemos mucha impotencia”, admitió.
El líder del Sitramun sostuvo que este conflicto “no puede ser ajeno a los socios políticos que hoy tienen que venir a darle una mano (a Cavagnero), no sólo venir a pedir votos; dónde está la parte política, quisiera ver cómo se manifiestan”.
“Quiero creer que los nuevos cuatro años que van a venir, en el próximo mandato, no van a ser así”, manifestó.
Ante una consulta de este diario, a raíz de que previo a los comicios no hubo demoras en los pagos, admitió que “el objetivo era ganar la provincia y Villa Nueva; no voy a hablar si hay responsables pero no han hecho los cálculos bien. Hoy pasaron las elecciones, ganó el PJ y el problema lo siguen teniendo los trabajadores”.
“Tenemos una preocupación muy grande. El Ejecutivo tomó el compromiso de un aumento escalonado, el mes que viene tiene que dar el 8% más, luego se viene el aguinaldo”, recalcó.
Cerca de 260 trabajadores padecen hoy la falta de pago. Son cerca de 230 los de planta permanente y una treintena de contratados. Según cálculos de Sosa, el 20% del total no está agremiado.