Con instalaciones colmadas se desarrolló la "Jornada Anual de Carnes", en busca de nuevas formas y normas que permitan achicar costos, disponer de más tierra para la agricultura y convertir los sistemas en mixtos o bien para receptar información de cómo lograr darle valores agregados a la producción y cómo organizarse en formas asociativas.
Los temas fueron diversos e interesantes, como el de la ingeniera Miriam Gallardo del INTA Rafaela, quien expuso claramente la posibilidad de utilizar subproductos agrícolas como alimentos nutricionales y fibras en ganados de carne.
Por su parte, el ingeniero Oscar Melo, planteó a la concurrencia el "Desafío de ser eficiente", a lo que se sumó el detalle de las características de la selección de toro para rodeo, que se acotó desde el Instituto Nacional de Promoción de Carne Vacuna (INPCV) y del ganado "Sanga" (africano), "que se está incorporando rápidamente a las zonas áridas, por su resistencia a las altas y bajas temperaturas y su poder de mantenimiento con pastos de inferior calidad", según la disertación del ingeniero Andrés Costamagna, secretario de la asociación de criadores de dicha raza.
A continuación, destacamos algunas generalidades que pueden ser útiles para que los productores obtengan algunos puntos de referencias sobre lo tratado en la Jornada.

Alimento en confinamiento

"El confinamiento o semi confinamiento debe ser un tema evaluado desde todos los aspectos", dijo el doctor Fernando Barra, técnico de la División Nutrición de ACA, ya que "desde la construcción de los corrales, se debe tener en cuenta las condiciones climáticas y ambientales, la cantidad de lluvia anuales (para considerar los declives) y el lugar para reciclado o almacenaje de efluentes.
A lo antes descrito sigue el plan alimentario que debe tener el animal para carne como calidad alimentaria, que no desvíe el gusto del producto final al mercado, que obtenga el peso óptimo en el tiempo requerido y que los costos ayuden para que esta “industria de la carne” pueda seguir en pie.
La limpieza de los corrales, que dependerá del protocolo de tratamiento de efluentes, debe ser un tema primordial en el manejo durante el encierro.
El “desbarre” de los mismos, se aconseja cada 45 días de diciembre a abril y cada 90 días de mayo a noviembre.
Fibras: el tema de las fibras en la alimentación, garantiza la nutrición y el rumen además de representar la pared celular de los vegetales e influir sobre la masticación y la rumia.
El maíz entero, es una buena fuente de fibra para feedlot, especialmente si se muele con rollos de primera calidad.
Fibras efectivas: pastoreo directo-rollo entero, mezclado con balanceados en las proporciones adecuadas.
Silo de maíz: para que el silo de maíz conserve su calidad, se deben consumir diariamente no menos de 30 centímetros del mismo, por lo que los silos “torta” no son recomendados. Para feedlot, sí o sí, el silo debe ser bolsa, ya que de esa manera se garantiza la alimentación correcta y la calidad del silo.
Incorporar mediciones: las mediciones de control de peso y desbaste como las de alimentos diarios y asimilación, deben incorporarse a los sistemas de encierros como una rutina, porque se ha probado en otros países (Estados Unidos, Nueva Zelanda, Israel) que el control permanente de estas mediciones, ayudan no sólo en el cálculo y la medición de costos, sino también en la definición de la toma de decisiones.
Superficies: depende del tipo de intensificación que se adopte, pero lo aconsejable es 30 metros cuadrados por animal en las zonas de la pampa húmeda y semi húmeda y de mayor cantidad para zonas áridas como Chaco y Formosa.
Temperaturas: el ambiente térmico que rodea a los corrales, determinado por la combinación de la temperatura del aire, la humedad ambiente y la radiación incidente debe tenerse en cuenta, ya que las razas que se producen en nuestro país, cuando la temperatura nocturna no desciende de los 27 grados, se estresan, y el estrés es muy negativo para el ganado vacuno.
Sombras: las sombras, indispensables, deben ser altas, y se puede ir cambiando el hábito a los animales de comer de noche, iluminando los corrales, para que de día, permanezcan en la sombra. Es una cuestión de tiempo, que permite que el animal esté en mejores condiciones, teniendo en cuenta que la vaca, durante un día come en tres horas, rumia otras tres, y duerme ocho horas. Este cambio puede ayudar a maximizar la conversión.
Comederos: los comederos deben ser realizados de acuerdo al tipo de confinamiento y a la cantidad de animales. De todas maneras, se sugirió que deben estar llenos durante 21 horas, pero tres horas por día deben estar vacíos, para que el animal no altere su rumen.

Evolución del campo: Sistemas Dobles

Una alternativa sostenible y con perspectivas a la exportación es el Sistema Doble, de corral y campo.
De esa manera se puede cumplir con los requerimientos del mercado externo, especialmente el de la Unión Europea, que sólo adquiere carne vacuna, de animales criados a cielo abierto, ya sea totalmente en sistema pastoril, o mixto, lo que da a los productores la opción de los mercados, ya que al seleccionar la opción de confinamiento total o bajo techo se determina también el mercado, y en este último caso, sólo se podrá abastecer al mercado interno.

Fideicomiso: Carnes del Sur

En una propuesta innovadora y en respuesta a las necesidades de generar valor agregado a la producción de carne, que permita sostener la competencia con la agricultura, un grupo de productores del sur de Córdoba, San Luis, y Catamarca, se asociaron en la propuesta de un fideicomiso, y se convirtieron en exportadores de su propia carne.
Una tarea que demandó decisiones riesgosas, especialmente por lo desconocidas, pero llevó a realizar gestiones y acuerdos con frigoríficos, visitas a mercados internacionales, y lograron instalar un producto de calidad ya reconocida, con aristas que presentan un buen y prominente futuro, según destacó con marcado entusiasmo el doctor Edgardo Bustamante, gestor de esta idea y que ahora puede contarla con el solo motivo de entusiasmar a seguir en el sector productivo cárnico a los demás productores.