El Salón de Usos Múltiples que la Biblioteca Bernardino Rivadavia (BBR) construye a pocas cuadras de su sede central, por voluntad de los integrantes de la comunidad educativa, se denominará "Bomarraca".
El concurso de propuestas que determinó el nombre del espacio polifuncional, organizada en el marco del 107º aniversario fundacional de la institución, se desarrolló durante todo el mes de agosto y contó con la participación de alumnos, docentes, jubilados e integrantes de la Fundación "Antonio Sobral".
Vale destacar que luego de cumplida la etapa reglamentaria del certamen quedaron postulados, además de la denominación ganadora, las propuestas "Aleph", "Edith Vera" y "Salón Esperanza Unida".
Finalmente, la sugerencia realizada por Ana Laura Aráoz bajo el seudónimo "Amarillo y Negro", se impuso por sobre las demás iniciativas. El resultado del concurso, fue dado a conocer en el acto donde se celebró el nuevo aniversario fundacional de la entidad.
"Encuentro este nombre pertinente dado que como ex alumna y actual personal de la institución, encuentro que este Hurra es símbolo de unión, de triunfo, de reconocimiento, de alegría, de un sinfín de emociones que resultan intransferibles para quienes pasamos la vida aquí y encontramos muchísimos momentos para cantarlos una y otra vez", fundamentó Aráoz.
"Si bien este canto tiene sus orígenes en el Nivel Medio (ver tradición amarilla y negra), la historia y sus rituales la expandieron, acercaron a festejos y alegrías de los otros niveles de esta gran institución. Esto denota una vez más que el Bomarraca nos representa y nos une", agregó la autora de la propuesta.
"En épocas como esta, donde prima el individualismo, la competitividad y no lo competente, la utilidad, el pragmatismo y el egoísmo, el Bomarraca es prenda de unión, de un profundo sentido colectivo. El cántico, entonado por decenas de generaciones de alumnos que pasaron por la institución, es una expresión del valor de la unión, de la pertenencia por un espacio altamente significativo en la vida de una persona", explicó Ana Laura que se desempeña como psicóloga en los niveles educativos de la BBR.

Tradición amarilla y negra

Según el profesor y ex alumno del “Riva”, Inocencio Dematteis (fallecido meses atrás), “entre los años 1940 y 1950, por iniciativa del profesor de Educación Física Jorge “Momo” Falcón, surge la canción del “Gomarraca Ró”, un tipo de hurra influenciado por las tradiciones de colegios norteamericanos, popularizados en inumerables filmes de la época”.
Dematteis o “Chencho” como lo conocían en sus años de estudiante secundario, integró la Promoción 1949 de la entidad “canaria” y explicó en escritos que donó a la institución que Falcón también fue el ideólogo de la actual insignia del colegio.
El creativo docente, luego de su paso por el ISBR, volvió a su Buenos Aires natal y se dedicó de lleno a trabajar como guionista de cine.
Su carrera alcanzó el máximo esplendor luego que Roberto “Sandro” Sánchez, lo eligiera para elaborar varios de los filmes que lo tuvieran en el rol protagónico principal.
Falcón falleció a principios de los ‘90, probablemente sin saber que el cántico que impulsó entre sus alumnos villamarienses, se transformó en uno de los símbolos institucionales más destacados para niños, jóvenes y adultos de todas las épocas.