"Este proceso iniciado en 2003 tuvo como objetivo central poner el ‘trabajo’ en el centro de las políticas", afirmó el coordinador de Formación Sindical Ricardo Gringras durante su paso por Villa María en horas de la tarde de ayer.
El funcionario del Ministerio de Trabajo de la Nación llegó a la ciudad para presidir un encuentro con referentes de los diversos gremios con un tema central de agenda: la implementación del Instituto de Formación Sindical.
"Estoy en Villa María por iniciativa del Gobierno local y de la CGT para ver si podemos implementar un programa de formación de cuadros sindicales con el apoyo de la Universidad Nacional de Villa María", comentó el funcionario a la periodista de EL DIARIO.
El diálogo tuvo lugar minutos antes del inicio de la jornada de trabajo con los referentes de diversos gremios.
El objetivo de Gringras estuvo centrado en escuchar las voces de quienes vienen transitando el camino del sindicalismo para poder "armar el diseño curricular, la determinación de necesidades y las posibilidades" para organizar la actividad capacitadora.
El programa del Ministerio a cargo de Carlos Tomada, está pensado para darle la mayor cantidad de elementos a jóvenes que abracen la carrera sindical en los tiempos que corren.
"Los sindicatos necesitan hoy cuadros a la altura de los nuevos desafíos."
Los desafíos, para Gringras, son los cambios que Argentina tuvo en los últimos años.
"Se crearon cinco millones de puestos de trabajo nuevos, la desocupación bajó del 25% al 7% y está en marcha la negociación colectiva", especificó para presentar el escenario al que hizo referencia.
Seguidamente agregó: "A veces no tenemos conciencia de lo que implicó para el mundo sindical la negociación colectiva que no es sólo la discusión de salarios sino de todos los temas del ámbito del trabajo".

"Conducir los conflictos"

La movida, en este sentido, es muy positiva para Gringras. "Por suerte hay conflictos, la gente se anima a reclamar por sus derechos y a esos conflictos hay que conducirlos y llevarlos a buen puerto."
"Los afiliados demandan cada vez más servicios a los sindicatos", destacó.
Con respecto a la permanencia, por años, de determinados dirigentes en las cúpulas sindicales, Gringras respondió: "Se están renovando, no son procesos que se hacen en un día ni implican tirar la gente por la ventana. Se critica al sindicalismp pero no hay muchas instituciones que tengan elecciones públicas cada cuatro años."
"En Argentina hay más de tres mil sindicatos, uno puede discutir el modelo pero hay libertad sindical y renovación", indicó seguidamente.
Las divisiones de las centrales obreras, la falta de reconocimiento a la CTA fueron los otros temas puestos por la periodista en la charla con el profesor de historia y especialista en sindicalismo.
"Acá hay una ley que regula la actividad, la 23.551, y habla de una sola central obrera."
¿No se puede cambiar?, fue la pregunta.
"Se puede. El que debería dar el puntapié inicial es el propio movimiento sindical y no que venga por imposición."