En los últimos tiempos, la ciudad y el país se han visto conmocionados por la inusual cantidad de muertos, especialmente jóvenes, por accidentes de tránsito.
No hay una sola causa, sino infinitos factores concurrentes responsables de estas tragedias, o de las secuelas con severas discapacidades.
Hablaré sólo del factor humano, y del otorgamiento del carné de conducir.
Es fundamental que quien sea habilitado para conducir goce de excelente salud física, mental y psíquica, y para demostrar que esto sea así, es imprescindible un examen neurológico y un electroencefalograma.
Relacionado con esta temática, hablaremos de una enfermedad neurológica, la epilepsia temporal, una de las tantas formas de epilepsias. En ella se producen crisis psicomotoras que pueden durar desde minutos a horas y dentro de los síntomas más frecuentes, mencionaremos:

Aura o síntoma aviso

Es una sensación rara, indefinida, generalmente de un malestar o sensación de vacío que comienza en el estómago y sube hasta el pecho. Suele aparecer minutos antes y avisa de la próxima crisis. Siempre es igual para cada persona. Es el único síntoma que se recuerda, teniendo total amnesia de los demás.

Ausencias

Se suprimen todas las funciones mentales, incluyendo la comprensión, la reactividad y la memoria. Comienza y termina de una manera brusca, dura de segundos a minutos. La persona (niño o adulto) está ausente en el sentido literal de la palabra. Queda inmóvil, con la mirada perdida en el vacío. No ve, no oye, no siente.
La crisis suele germinar con una sonrisa, con amnesia de lo ocurrido, pero con una sensación rara de que algo ha ocurrido, y que los epilépticos de vieja data suelen manejar desde el punto de vista social o laboral.

Conciencia

Durante la crisis el paciente suele estar despierto, pero con un estado confusional o estuporoso (comportamiento estúpido), con incoherencias, irrealidad y despersonalización. Su función mental está obnubilada, llamándosela "crepuscular".

Automatismos

Actúa como un autómata. La persona puede seguir trabajando, caminando o conduciendo una bicicleta, moto o vehículo o continuar con cualquier actividad motriz, desde minutos a horas, sin tener conciencia, en forma automática, con amnesia total de lo ocurrido.

También se registran ilusiones, alucinaciones visuales, auditivas, oníricas, etcétera.

Personalidad y psiquismo

Las crisis y la personalidad de estos enfermos suelen ser complejas y alteradas, y muchas veces se confunden con enfermedades psiquiátricas.
Para mayor ilustración detallaré sucintamente algunas experiencias de mis pacientes:
- Un camionero hacía regularmente transporte entre Villa María y Córdoba, relatándome que regresando por la ruta 9, recordaba haber pasado por Oncativo, no recordando nada más hasta llegar a Villa María. Es decir que el trayecto Oncativo-Villa María quedó en blanco, y condujo en forma automática. Relata que ese día no se sentía bien, y que regresaba con algo de hambre y sueño. El sueño, la falta de alimentos (hipoglucemia), el calor excesivo, algunas luces, el estrés y la menstruación en la mujer facilitan las crisis.
- Otro caso es de un paciente que relata que vivía en barrio Los Olmos, que saca su moto para dirigirse al centro de Villa María, donde debía realizar trámites. Cuando toma conciencia está en la plaza de Villa Nueva, no recordando cómo hizo para llegar allí. Su último recuerdo es estar cerrando la puerta de su casa. La amnesia del recorrido y sucedido es total.
- Esto pasó en la ciudad de Buenos Aires algunos años atrás, y en su momento la prensa lo difundió. Un taxi transportaba a dos chicas. En determinado momento comienza a aumentar la velocidad y conducir en forma zigzagueante. Las chicas le solicitan que disminuya la velocidad o que pare. El conductor es como si no las oyese y no contesta. Una de ellas entra en pánico y se arroja del auto, sufriendo un severo traumatismo craneoencefálico.
En el juicio se comprueba que el chofer padecía de una epilepsia temporal, diagnosticada y medicada muchos años atrás, pero él por su cuenta había abandonado el tratamiento.
Por lo expuesto y tal como acontece con los pilotos de aviación, para el otorgamiento del carné de conducir. Es necesario el examen neurológico y la realización de un electroencefalograma.
Estamos viviendo momentos trascendentes en la historia del país. Con cambios, transformaciones y dignificaciones que años atrás eran impensados, donde el hombre es el centro y destinatario de una mejor y más digna calidad de vida, y allí debe estar la salud como bien supremo, y todo lo que se haga por ella y para ella es bienvenido. Pero aún así, siempre será insuficiente.
Todo se puede reconstruir, transformar o modificar, pero ante la pérdida de una vida joven, todo carece de valor.

Dr. José Argarate
Neurólogo
MP 8123 CE 2666