Bajo una fuerte lluvia que le dio un tinte “especial” a la situación se dio una conmovedora celebración tras una vibrante y prolongada definición por penales para los chicos de la Sub 17, quienes acompañados en todo momentos por los más chicos -que alentaron siempre pese al trago amargo de su eliminación previa- formaron una montaña de adolescentes festejando un durísimo pasaje a semifinales.
Así terminó una mañana a pura agua y de sentimientos encontrados para la Liga Villamariense. Es que, en primer turno, los chicos de la Sub 15 se despidieron invictos del certamen porque cayó en una definición apretada desde los doce pasos y después sobrevino, desde la misma forma, la felicidad de la Sub 17 al sortear a su favor la lotería de los penales, donde el arquero Gavagnin se puso el traje de héroe al anotar el definitorio.
Lo mejor de la jornada, sin dudas, se vivió en lo que sucedió inmediatamente después que el arquero marcara su conquista; es que, empapados, llenos de barro, con todo el cansancio y la felicidad a flor de piel, se juntaron ambos seleccionados en un sector de la cancha 1 y protagonizaron un festejo emotivo, de descarga total que, a continuación, prosiguió a puro cánticos con los familiares presentes y finalizó en una actitud deportiva destacada, con la despedida con aplausos a los abatidos juveniles de la Béccar Varela.
Y ya después sí, en un colectivo que mezcló emociones, los más grandes se tranquilizaron y ya pensar en el trascendental cotejo de hoy por la mañana cuando desde las 11.15 y en cancha 2, afronte las semifinales ante su par Bellvillense, que derrotó 2-1 a Río Cuarto.
Un 1-1 parejo protagonizó el Sub 15 villamariense frente a Laboulaye, en donde los goles llegaron por sendos tiros libres. A los 7 minutos, su rival se puso en ventaja con un muy buen remate de su delantero que se coló en el ángulo; luego, Oviedo empató con otro tiro libre que se cerró y sorprendió al arquero rival.
En el trámite general que se visualizó en la cancha 3 ninguno logró marcar diferencias, por lo tanto se dio un partido de pocas luces y en el que los chicos villamarienses sintieron el trajín físico de los últimos cotejos y prácticamente no logró inquietar en el complemento a su rival, que si tuvo una chance muy clara con un tiro cruzado apenas desviado.
Entonces, el referí decretó el final del cotejo y la cuestión debió definirse desde los doce pasos, donde los dirigidos por Gustavo González no empezó bien la serie, falló los primeros penales, pero luego se recuperó e igualó. No obstante, el arquero de Laboulaye contuvo el sexto penal a Sanabria y desató el festejo del rival, para la amargura de los chicos de la Liga Villamariense, que igual supieron reconocer, más allá del dolor, su muy buen campeonato.
Entonces, hubo que ir a la cancha 1, donde los más grandes protagonizaron un empate sin goles frente a la Béccar Varela. En la primera etapa, a través de la movilidad y potencia de Ludueña, los dirigidos por Negrette generaron sus opciones, remarcando su mejor comienzo.
Igualmente, el rival mejoró con los minutos y tuvo chances con el juvenil de La Laguna, Nicolás Lazarte, quien igual se encontró con buenas respuestas de Gavagnin. Además, protagonizó la más clara en el inicio del complemento pero Póveda marró un gol increíble.
Después, ante la lluvia constante, el campo de juego conspiró sobremanera el trámite y entonces se vieron intentonas sin un peligro considerable por parte de ambos equipos, que terminaron conformándose con el 0 a 0 y a definir en los penales.
Y dicha definición fue para el infarto, ninguno supo errar en las primeros cinco ejecuciones por bando y, en el sexto, un remate desviado de la Béccar le permitió a Pattuzzi concretar la clasificación, pero tiró por arriba. A lo que, hubo que continuar, llegó otro remate desviado del rival, inmediatamente llegó la orden para que pateará el arquero Gavagnin, quien marcó el penal que permitió el pasaje a la semifinal.
Tras convertir el portero “gallego” sobrevino el momento de la algarabía, del desahogo, de dar esas corridas interminables en las cuales todo el cansancio y la tensión quedan en el olvido y sólo quedan las ganas de celebrar. Y no era para menos ya que estos juveniles de nuestro fútbol doméstico están entre los mejores cuatro seleccionados de la provincia, un mérito elogiable.

Penales Sub 15
Villamariense Laboulaye
1 Oviedo (desviado) Salgado (gol)
2 Prato (atajado) Muñiz (atajado)
3 Urquiza (gol) Teixido (gol)
4 Brusa (gol) Molina (gol)
5 Guilhen (gol) C. Cortez (desviado)
6 Sanabria (atajado) Goñi (gol)

Penales Sub 17
Villamariense Beccar Varela
1 Páez (gol) Ridolfi (gol)
2 Ñáñez (gol) Poveda (gol)
3 Giusiano (gol) Funes (gol)
4 Rey (gol) Gianotti (gol)
5 López (gol) Rasol (gol)
6 Pattuzzi (desviado) Méndez (desviado)
7 Bracamonte (gol) Pinardi (gol)
8 Gavagnin (gol) Georgetti (desviado)

Fotografías: 1) Los juveniles de la Liga Villamariense festejaron a pura euforia la clasificación a semifinales
2) La amargura de los chicos de la Sub 15 tras quedar afuera en los penales