Se halla internado en el Hospital Regional Pasteur un pequeño niño de sólo siete meses de vida, quien es asistido a raíz de las serias lesiones que le fueron provocadas en forma violenta en más de una ocasión en su seno familiar, informó ayer a medios radiales de Villa María el fiscal de Instrucción del Tercer Turno, Félix Martínez.
En relación al nuevo caso de violencia familiar que se indaga por estas horas, la Justicia ordenó la detención del padre del menor, quien continuará bajo esa condición, toda vez que el fiscal Martínez apuntó que, “con los elementos de prueba (que se han recogido) se determinó que el padre del niño fue el autor de los golpes”.

Los médicos

El caso comenzó a develarse durante el pasado fin de semana, cuando el sábado último el bebé recibió la última golpiza, acción que le causó lesiones en la cabeza, razón por la cual la indefensa víctima fue trasladada al nosocomio regional para ser asistida por los profesionales de la salud.
Lo primero que observaron y llamó la atención de los facultativos fueron las características de las heridas que presentaba el niño, sobre todo en el rostro, lo que determinó que se realizaran estudios más extensivos sobre su cuerpo.
Fue entonces que, de acuerdo a la información proporcionada por la autoridad tribunalicia, los médicos detectaron que el niño presentaba varios traumatismos, no del momento, sino de golpes que le habrían aplicado en jornadas anteriores.
En tal sentido, el fiscal explicó: “Tomamos conocimiento (del hecho) a través de los médicos que atendieron al pequeño y advirtieron algunos golpes sospechosos”.
Ante ello, “se ordenó un mapeo radiográfico -prosiguió Martínez en declaraciones a la radio AM local- que determinó la existencia de fracturas anteriores, no tan viejas”.
Precisamente, los profesionales intervinientes diagnosticaron que el bebé, además de las lesiones en la cara provocadas horas atrás, también sufrió fracturas anteriores en una de sus extremidades superiores y en una de las clavículas.

En Arroyo Cabral

Todo parece indicar que los sucesivos hechos de violencia de los que fue víctima el niño, ocurrió en Arroyo Cabral, lugar donde actualmente está radicada la familia que integran los padres y tres niños (el bebé tiene dos hermanos, de corta edad, pero mayores que él).
La aludida familia, cuyas identidades se reservaron por tratarse de hechos que aún se investigan y, sobre todo, porque fueron encuadrados sugestivamente como “delitos de instancia privada”, llegó a la vecina localidad hace poco más de tres meses, procedente de Villa del Rosario, donde incluso habría nacido el niño que fue golpeado.

Mejoría

El fiscal Martínez, por otro lado, dio cuenta que, pese a la violencia desatada en contra del niño, éste “sigue internado, en buen estado y evoluciona favorablemente”.
De todas maneras, el funcionario judicial no informó cuándo podría ser dado de alta, aunque dio a entender que su vida no corre peligro.

Nadie sabe nada

Por otro lado, se apuntó que, al ser consultados los vecinos cabralenses que residen en inmediaciones a la vivienda que habita la familia, ninguno de ellos aportó datos significativos en relación con los hechos que se investigan.
Los vecinos, ante el requerimiento, dijeron no escuchar ni ver nada sobre los episodios de violencia reiterada en los que fue víctima el bebé.

Detención

Como se adelantó, el progenitor del pequeño es el principal sospechoso de ser el autor de la conducta violenta en perjuicio de su hijo, por lo que fue detenido horas después de conocerse el caso luego de los estudios médicos.
Probablemente hoy, una vez que se haya designado el abogado defensor, el presunto ejecutor de los ataques contra el menor podría prestar declaración ante el fiscal que entiende en la causa.
De todas maneras, el propio fiscal Martínez confirmó no sólo el hecho sino también la detención del sujeto.
Asimismo, pudo conocerse que la Justicia adoptó las medidas pertinentes para preservar a la madre y a los dos pequeños hermanos del bebé.