En una entrevista realizada por el sitio Lechería Latina, Javier Baudino, presidente de Apymel, aseguró que el sector que representa atraviesa un momento muy complejo. “Es algo repetitivo para la época del año, mostrando toda la debilidad que tiene el sector Pyme y pone al descubierto todo el trabajo que hay que hacer desde el empresariado, Gobierno, gremios, etcétera. Todos unidos para que Argentina mantenga viva la industria Pyme que tanto trabajo lleva a los pueblos donde nadie va a invertir sin estos industriales. Las Pymes tuvieron un período en que pensaron que crecían de manera vertiginosa, fue cuando la gran industria les tomaba cualquier excedente y con ello podían mantener clientela abastecida todo el año, sin grandes preocupaciones sobre los excedentes, ni siquiera lo estacionario. Esto también permitió al productor cobrar mucho mejor su producción, ya que todo lo que se producía se vendía, se manejó baja rentabilidad y se proyectó poca inversión, se perdió el norte en muchos casos, hay otros en que no fue así y esas empresas tienen otras expectativas.
Ahora, como se suele decir, con el diario del lunes, los partidos del domingo son todos malos... era el mercado en ese momento y faltaban proyecciones de corto y mediano plazo, cosa que creo que se aprendió ahora.”
Además, analizó para el sitio especializado de lechería la situación del mercado interno, indicando que reaccionó “ante la cantidad de ofertas que enviaron las empresas de la manera esperada, aumentan la presión para obtener más ofertas, mejoran su renta y compran lo que les hace falta y nada más. Esto es, con expectativa de bajas las compras se retraen, se transfiere stock de las cámaras de los súper a las industrias y éstas ante la presión sobre las estructuras a lo que se le suma lo financiero, buscan anticipar las ventas con más y más ofertas. Esto también obedece a que las empresas en cierto modo carecen de políticas comerciales, previsión sobre los stocks y sobre todo disponibilidad financiera. Creemos que los picos de producción están sucediendo y estacionalmente deberían bajar un poco los recibos, eso ayudará a equilibrar de alguna manera el mercado, la expectativa mayor es que la gran industria vuelva a comprar algo de leche, que indudablemente mejorará la expectativa actual, debemos recomponer la negociación con los mercados, para retomar los ingresos que permitieron el desarrollo del sector, especialmente el tambero, además debemos obtener renta suficiente para la reconversión industrial tan necesaria”.
En otro tramo de la entrevista, dijo que si bien se esperaba un incremento de producción lechera, en realidad fue mayor que las estimaciones más optimistas.
“Aquí hay una cosa importante, nuestras Pymes usaban la capacidad instalada de las industrias grandes que decían no disponer de la cantidad de leche suficiente. Semanalmente se trabajaba sobre una proyección de leche derivada de los excedentes industriales. El problema se desató desde que las industrias tomadoras dejaron de tener el compromiso de compra de esa leche, quedando al libre albedrío el destino de ese volumen, que ante la necesidad de procesar un producto tan perecedero las empresas lo comenzaron a industrializar y querer insertar en el mismo mercado que hasta hacía poco tiempo ofrecían un 15% - 20% menos de mercadería, desencadenando una lluvia de ofertas.”
Entienden que las Pymes deben avanzar en la “profesionalización” para reconvertirse y no ser expulsadas del sistema por las grandes industrias. “Si no nos convertimos la competencia entre pares definirá quién se queda y quién se va, llevando una gran ventaja las grandes empresas. Comenzar a hablar de posicionamiento de marca, marketing, calidad estable con trazabilidad, packaging, son elementos que deberemos acostumbrarnos, esto en muchos casos solos no lo lograremos, por eso hablamos de asociativismo, no de amontonamiento de empresas, de buscar formas de complementarse entre sí, existen muchas ideas, hay que trabajarlas, esto debe estar acompañado por algunos cambios estructurales de las industrias, la modernización, introducción de tecnologías que eleven la productividad, definirse cada empresa qué lugar debe y quiere ocupar, para que su crecimiento esté acorde a ese objetivo. Es indudable, que cualquier proyecto industrial debe tener una mirada hacia el comercio exterior, incluso si son Pymes, el mercado interno está totalmente asegurado en volumen y de no mediar una tragedia seguirá así. Aquí volvemos al tema del asociativismo como eje de la conquista de los mercados mundiales. Tenemos espejos en donde mirarnos, el vino es uno de ellos, son parecidos no iguales, por suerte nuestras escalas son mayores, por lo tanto el desafío lo es también.”
Finalmente, elogió la actividad de la Subsecretaría de Lechería indicando que le dio voz a las Pymes del sector lechero. “Tenemos apoyo para intentar mercados inmensos como el chino. La liquidación única puede ser una gran herramienta, hacia una mejora, ya que somos principalmente queseros y hoy no se privilegia el sólido, sino la leche como un producto fluido, industrialmente conviene menos. Con este método de informes creado, se conocerá no sólo la tendencia de la lechería como lo ofrecen hoy 15 empresas, sino prácticamente toda la leche, ese flujo de información casi en tiempo real será vital para delinear políticas de corto, mediano y largo plazo.”